Una amplia operación de búsqueda se lleva a cabo cerca de la costa japonesa por siete personas desaparecidas tras el choque de dos helicópteros militares que dejó un tripulante muerto el fin de semana.
Los helicópteros SH-60K, con cuatro tripulantes cada uno, realizaban maniobras de localización submarina la noche del sábado cerca de las islas Izu, en el Pacífico.
Diez barcos y cinco aeronaves de la Fuerza de Autodefensa Marítima de Japón peinaban las aguas con apoyo de la guardia costera y la fuerza aérea, indicó a AFP un oficial de la marina. “Tenemos una operación de 24 horas para la búsqueda, que se realizó todo el día y toda la noche”, dijo el oficial.
Poco después del accidente, los rescatistas encontraron a una persona que posteriormente se confirmó como muerta, en medio de los escombros y los registros de vuelo. No había rastro de los restantes siete tripulantes.
El ministro de Defensa, Minoru Kihara, afirmó que hasta ahora no hay información de los registros de vuelo que sugiera algún problema técnico en los helicópteros.
La comunicación con uno de los helicópteros se perdió después de las 10:00 p.m. hora local y unos 25 minutos después, las autoridades se percataron de que habían perdido contacto con el segundo aparato.
Los rescatistas recuperaron en la misma zona una grabadora de datos de vuelo, un aspa de cada uno de los helicópteros, y fragmentos que, se cree que pertenecen a ambas aeronaves, señales de que los dos SH-60K volaban muy cerca uno del otro, dijo Kihara. Las autoridades analizarán los datos de vuelo para tratar de determinar la causa del accidente.
La Fuerza Marítima de Autodefensa desplegó ocho buques de guerra y cinco aeronaves para la operación de búsqueda y rescate de los tripulantes desaparecidos.
Las aeronaves multimisión de doble motor, diseñadas por Sikorsky y conocidas como Seahawk, fueron modificadas y producidas en Japón por Mitsubishi Heavy Industries. Participaban en un entrenamiento nocturno antisubmarinos, dijo Kihara. Uno de los helicópteros perdió el contacto y envió una señal de emergencia automática un minuto después.
Solo se recibió una llamada de auxilio, lo cual es otra señal de que ambos helicópteros estaban cerca del mismo lugar porque sus señales usan la misma frecuencia y no pudieron diferenciarse, dijo Kihara.
Uno de los helicópteros pertenecía a una base aérea de Nagasaki y el otro, a una base de la prefectura de Tokushima. Las aeronaves SH-60K suelen desplegarse en buques destructores para misiones antisubmarinos.
El entrenamiento del sábado únicamente involucró a la armada japonesa y la operación no formó parte de un ejercicio multinacional, dijeron las autoridades de defensa. Indicaron que no se divisaron aeronaves o buques de guerra extranjeros en el área.
Como parte de su estrategia de seguridad de 2022, Japón ha venido acelerando su preparación militar y reforzando su poder disuasivo en las islas del suroeste japonés del Pacífico y del mar de China Oriental para contrarrestar las actividades militares cada vez más agresivas de China. En años recientes, Japón ha realizado sus propios ejercicios navales, así como maniobras conjuntas con su aliado Estados Unidos y otros socios.
Con información de Associated Press y AFP*