Rusia sigue reforzando su presencia militar en las fronteras con Ucrania, declaró este miércoles el secretario general de la Otan, Jens Stoltenberg, subrayando que “por ahora” no hay señales concretas de una desescalada pese a las declaraciones de los responsables en Moscú.
“No hemos constatado ninguna desescalada en el terreno por ahora. Al contrario, parece que Rusia sigue reforzando su presencia militar”, afirmó Stoltenberg al inicio de la reunión de los ministros de Defensa de la alianza en Bruselas.
“Rusia puede aún invadir Ucrania sin previo aviso. Las capacidades están desplegadas y la presencia militar es importante, superior a 100.000 soldados”, dijo el jefe de la Otan.
Stoltenberg tomó nota del mensaje de Moscú sobre su voluntad de seguir adelante con los esfuerzos diplomáticos y afirmó que la Alianza está “lista para conversar”, pero advirtió que Rusia debe acompañar sus declaraciones con una retirada de las fuerzas desplegadas para que se concrete una distensión.
“Estamos siguiendo muy de cerca lo que hace Rusia. Hemos constatado la llegada de tropas y de equipamiento pesado, después hubo un retiro de las tropas, pero los equipos y las capacidades siguen ahí”, indicó el alto mando de la Otan.
Stoltenberg indicó que la Otan quiere una retirada “real, duradera y no solamente un movimiento incesante de tropas”.
“Estamos listos a reunirnos con Rusia, pero nos preparamos para lo peor”, concluyó.
Kremlin considera “positivo” que Biden quiera “negociaciones serias”
El Kremlin consideró “positivo” este miércoles que el presidente estadounidense Joe Biden apueste por el diálogo para resolver la crisis entre Rusia y los países occidentales por Ucrania.
“Es positivo que el presidente de Estados Unidos haya expresado su deseo de mantener negociaciones serias”, dijo a la prensa el portavoz de la presidencia rusa, Dmitri Peskov.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, mantuvo el martes la presión sobre Rusia ante el riesgo de un ataque contra Ucrania, algo que sigue considerando “una gran posibilidad”, pero apostó a la diplomacia para resolver la crisis.
“Recibimos con agrado que el presidente de Estados Unidos, uno de los países más poderosos del mundo, piense en la nación rusa”, dijo Peskov.
“Por supuesto, preferiríamos no escuchar amenazas sobre lo que nos ocurriría si hacemos tal cosa o no hacemos tal otra”, agregó.
“Estamos cansados de estas amenazas”, reiteró.
El portavoz de la presidencia rusa previó que las conversaciones para resolver esta crisis serán “muy complejas y requerirán flexibilidad por ambas partes”.
Rusia exige ciertas garantías para su seguridad, comenzando por la certeza de que Ucrania no será admitida en la Otan, algo que los países occidentales se niegan a conceder.
No quedará “un solo soldado ruso” en el país tras maniobras conjuntas
Las autoridades bielorrusas prometieron el miércoles que todos los soldados rusos desplegados en su territorio para realizar maniobras militares abandonarán el país en cuanto terminen estos ejercicios, el 20 de febrero.
“No quedará un solo soldado, un solo equipo en el territorio bielorruso tras las maniobras militares”, dijo el ministro de Relaciones Exteriores, Vladimir Makei, en una rueda de prensa, respondiendo así a los temores que estas maniobras suscitan en un momento de miedo a una invasión rusa de Ucrania.
El funcionario justificó las maniobras por la actividad de la Otan en la región, en un contexto crispado por las acusaciones de los países occidentales de que Rusia prepara una invasión a Ucrania.
“Es una respuesta a las acciones tomadas por nuestros socios occidentales”, afirmó Makei que indicó que ni Moscú ni Minsk tienen interés en que haya una guerra.
Las maniobras rusas en Bielorrusia comenzaron el 10 de febrero pero fueron precedidas de un importante despliegue de las fuerzas rusas desde enero, que movilizaron blindados, baterías antiaéreas y cazas.
Estos ejercicios realizados junto a un estrecho aliado de Moscú coincidieron con el despliegue de más de 100.000 efectivos en la frontera con Ucrania, que según las autoridades rusas comenzaron una retirada parcial.
En un indicio de distensión, el ministerio ucraniano de Defensa anunció el miércoles en la mañana que el agregado militar de su país en Bielorrusia pudo asistir el día anterior a algunas maniobras.
*Con información de AFP.