El opositor venezolano, Juan Guaidó, exhortó a que no se termine la figura de gobierno interino más allá de “nombres o intereses personales”, luego de que se aplazara una sesión extraordinaria de la Asamblea Nacional para determinar el futuro de la presidencia encargada. Es un cargo que ha asumido desde 2019, pero cuya continuidad ahora está en vilo.
Guaidó presentó una propuesta con la que espera, según él, se pueda “defender la institucionalidad y la Constitución. Estamos a tiempo. Las competencias y responsabilidades del Gobierno (E) no pueden ser evadidas o delegadas con una modificación del Estatuto”, dijo en su mensaje divulgado en Twitter.
El venezolano, que en su momento fue reconocido por más de 50 países, aclaró que la mayoría que preside la Asamblea Nacional, los partidos Acción Democrática (AD), Un Nuevo Tiempo (UNT) y Primero Justicia (PJ), tienen la potestad para decidir terminar la presidencia o “defender esta figura constitucional y designar nueva directiva el 5 de enero”.
“Lamentablemente, a esta hora persiste la intención de eliminar el soporte institucional y constitucional que es una gran piedra en el zapato de la dictadura de Nicolás Maduro (...). Ante esto, un llamado a la sensatez y fortalezcamos la unidad (...). Las competencias y responsabilidades del gobierno interino no pueden ser evadidas o delegadas con una modificación del estatuto”, subrayó.
En ese orden de ideas, quien fuera reconocido como presidente encargado, incluso por naciones como Colombia, dejó entrever la posibilidad de apartarse de ese cargo; sin embargo, exhortó a que el gobierno interino sí continúe en marcha.
“Hagan lo que dicte su conciencia”
Su llamado es a que “no se destruya esa herramienta que ha servido de lucha por la democracia y que tanto nos costó crear. Ustedes tienen los votos para destruir la presidencia interina, no Maduro, ustedes. También tienen los votos para mantener y nombrar a las personas que la conforman. Hagan lo que dicte su conciencia”, destacó previo al debate que luego se planteó para el 3 de enero.
La discusión convoca a 104 miembros del Parlamento, elegido en 2015, cuyo periodo acabó el año pasado; no obstante, defiende su vigencia al denunciar como fraudulentos los comicios legislativos que se desarrollaron en 2020 y en los que el oficialismo recuperó el control de la cámara.
Para ello son necesarias dos votaciones con mayoría simple, la primera de ellas efectuada la semana pasada cuando se pusieron sobre la mesa dos proyectos: uno de ellos para el cese de la “presidencia encargada” desde el 5 de enero (que tuvo 72 votos). El segundo busca darle continuidad al menos por un año más (23 votos). También se registraron nueve abstenciones. La segunda estaría para concretarse este viernes.
“La insistencia por el mantenimiento (de esa figura) no tiene que ver con Juan Guaidó, es un deber (...). Considero que esta alternativa es mucho menos peligrosa que el salto al vacío que se pretende, desconociendo el artículo 230 de nuestra Constitución. (...) Nuestro juramento como diputados tiene un punto de honor: luchar por el rescate de la democracia, por el reencuentro de las familias, por poner fin a tantos años de sufrimiento y de conflicto”, agregó.
La de esta semana ha significado un panorama en vilo para Guaidó, luego de que la oposición reflejara que no ve en él a un candidato sólido para una reelección. De hecho, algunos de los principales partidos pidieron, mediante un comunicado, que la figura interina que este encabeza llegue a su fin. Lo anterior, al asegurar que tras casi cuatro años en funciones no se han alcanzado los resultados esperados.
*Con información de Europa Press y AFP.