Un extraño síndrome, cuyo primer caso se registró en el año 1968; tuvo lugar en República Checa, donde una menor fue salvada de complicaciones de severidad al tener la compulsión de arrancarse e ingerir su propio cabello. El personal médico retiró de su estómago las fibras que equivalían a un vaso de medio litro.
Tan inusual es este problema que, a nivel global, solamente se han conocido unas decenas de casos. A estos se suma el de la menor de 11 años y, según especialistas, suele tener mayor incidencia en niñas y jóvenes que no superan los veinte años, según explicó el cirujano jefe del hospital de Opava Matus Peteja.
“La enfermedad está relacionada con lo que llamamos tricotilomanía y tricofagia, que consiste en arrancarse y tragarse el pelo”, detalló el especialista europeo. La designación de su nombre es asociada con el cuento infantil de los hermanos Grimm que personifican a una mujer distinguida por su extensa cabellera.
Los riesgos del síndrome
En el caso de la pequeña checa, la cantidad de pelo a extraer superaba el volumen para que el procedimiento no dejara una alternativa diferente a la laparoscopia que, según el portal MedlinePlus, utiliza un tubo para tratar afecciones al hacer una incisión en el abdomen y que permite observar, gracias a un lente, la intervención.
“Si no se la hubiéramos retirado, la niña habría tenido dolores y hubiera ido perdiendo peso progresivamente. En un caso extremo, esto hubiera podido dañar las paredes del estómago y perforarlas”, dijo Peteja a AFP. Según el médico, la niña se encuentra bien; no obstante, será remitida a otros especialistas en psicología y psiquiatría para abordar su condición.
De acuerdo con la editorial académica Elsevier, que recoge un estudio al respecto, los síntomas incluyen náuseas, pérdida de peso, estreñimiento o diarrea, masa en el epigastrio (zona superior del abdomen) y lo que se conoce como hematemesis (vómito con sangre). Estos varían dependiendo el organismo y la elasticidad en el estómago de la paciente.
Referente a sus causas, el portal Psicología Online alude a que estas pueden variar e incluir características de obsesión compulsiva, depresión, angustia y ansiedad ligadas a la autoestima. Es por ello que en su tratamiento pasa de la parte física a la mental con más especialistas.
Lesión de Biden era cancerosa
Hace algunos días el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se sometió a una cirugía en la que le extirparon una “pequeña” lesión en la pared torácica y que, según su médico, Kevin O’Connor, era cancerosa. La Casa Blanca divulgó un informe en el cual el especialista apuntó a que “el lugar de la biopsia ha cicatrizado muy bien” y que el mandatario estaría en “vigilancia dermatológica”.
Se trataba de un carcinoma basocelular, cuya intervención fue realizada con éxito y “no tiende a extenderse ni a causar metástasis” ni había necesidad de seguir con tratamientos adicionales. Este difería de otros tipos de cánceres en la piel “más graves, como el melanoma o el carcinoma de células escamosas”.
La extirpación se efectuó durante un chequeo anual a mediados del mes pasado, luego del cual se afirmó que Biden estaba “sano, vigoroso, apto para ejercer sus funciones”, según el médico O’Connor, luego del examen médico. El especialista señaló que el jefe de Estado se expuso “mucho tiempo al sol en su juventud”.
Se prevé que Joe Biden anuncie que nuevamente apostará por la Casa Blanca en 2024, así como el exmandatario republicano Donald Trump. Sin embargo, otros nombres empezaron a aparecer en escena de cara a esa contienda.
*Con información de AFP.