Científicos revelan que se trata del Danionella cerebrum, uno de los peces más diminutos del mundo, con aproximadamente el ancho de una uña humana adulta, el cual es capaz de generar un sonido tan estruendoso como el de un disparo.
Este fenómeno rompe con el mecanismo convencional de producción de sonidos en peces, que generalmente involucra vibraciones de su vejiga natatoria, un órgano lleno de gas utilizado para controlar la flotabilidad.
En el caso del Danionella cerebrum, los científicos descubrieron que este pez utiliza contracciones rítmicas de músculos especializados para generar sonidos que resuenan en su entorno acuático, creando un mecanismo único y sorprendente.
A pesar de que el cerebro del Danionella cerebrum es el más pequeño conocido entre todos los vertebrados, su mecanismo para generar pulsos de sonido ha sido un enigma, ya que los mecanismos musculares vinculados a la vejiga natatoria no proporcionaban una explicación clara sobre el origen de este fenómeno.
Científicos de la Universidad Charité de Berlín han desentrañado el misterio, revelando un sistema de producción de sonido único en este diminuto pez. Este mecanismo incluye un cartílago que actúa como tambor, una costilla especializada y un músculo resistente a la fatiga. Gracias a esta compleja combinación, el pez puede acelerar el cartílago tamborileante con fuerzas extremas, generando así pulsos de sonido rápidos y potentes.
Este descubrimiento no solo arroja luz sobre la asombrosa capacidad sonora de este pequeño habitante de los arroyos de Birmania, sino que destaca la sorprendente adaptabilidad evolutiva de los organismos en el reino animal.
“Comprender esta extraordinaria adaptación amplía nuestro conocimiento del movimiento animal y resalta la notable diversidad de mecanismos de propulsión entre especies, contribuyendo a nuestra comprensión más amplia de la biología evolutiva y la biomecánica”, dice el artículo. El equipo de científicos utilizó grabaciones de video de alta velocidad para investigar el mecanismo de producción del sonido.
Así mismo, estudiaron el funcionamiento del sistema del pez, para producir sonido, un músculo especial mueve una costilla que se encuentra al lado de la vejiga natatoria hacia un trozo de cartílago. Cuando se suelta la costilla, golpea la vejiga natatoria y emite un sonido de tamborileo. La costilla es mucho más dura en los machos, lo que explica por qué las hembras no producen sonidos.
Los científicos no han establecido por qué los peces emiten sonidos tan fuertes, pero sugirieron que podría ayudar a navegar en aguas turbias o ser una táctica agresiva utilizada por los machos para disuadir a la competencia.
*Con información de The Guardian.