En Australia una familia vegana, que había pedido previamente a uno de sus vecinos cerrar la ventana cuando cocinaba carne, amenazó con tomar medidas después de que su solicitud hubiera sido ignorada: “Suficiente, es suficiente”, escribieron en la carta.

Aparentemente el vecino no respondió positivamente a esta primera comunicación, por lo que vino una segunda carta en la que acusaron al vecino de ser “francamente grosero”. | Foto: © 2017 Willie B. Thomas

Las cartas

De acuerdo con el diario británico The Mirror, que reporta la historia, los vecinos había enviado una primera nota, firmada por “Sarah, Wayne y los niños”: “Hola, vecino, ¿podría cerrar la ventana lateral cuando cocina, por favor?”, decía.

Luego explicaba lo que significaba ser veganos: “Mi familia es vegana (solo comemos alimentos de origen vegetal) y el olor de la carne que cocinas nos hace sentir enfermos y molestos. Agradeceríamos su comprensión”.

Aparentemente, el vecino no respondió positivamente a esta primera comunicación, por lo que vino una segunda carta en la que acusaron al vecino de ser “francamente grosero”.

“Expuse mi preocupación por el olor a carne, que hacía que mi familia se sintiera enferma y molesta, y usted hace una parrillada el sábado por la noche invitando a mucha gente, y sabiendo que esto nos afectaría a mí y a mi familia”, decía la segunda carta. | Foto: GETTY IMAGES

En esta nota decían quienes firmaron, que ellos habían hecho todo lo posible por causar malestar. “Expuse mi preocupación por el olor a carne, que hacía que mi familia se sintiera enferma y molesta, y usted hace una parrillada el sábado por la noche invitando a mucha gente, y sabiendo que esto nos afectaría a mí y a mi familia”.

Las redes

Además de esta molestia, los vecinos veganos expresaron su profunda incomodidad, porque la primera comunicación se hubiera compartido en las redes sociales: “Mi amiga Tina me dijo que llevaste mi carta a las redes sociales y te resultó contraproducente” afirmó, aludiendo a que muchas personas habían criticado a quien compartió la información, por violar la privacidad de esa comunicación.

La carta luego concluyó con una última súplica. “Por favor, no más barbacoas y mantenga esa ventana cerrada cuando cocine, de lo contrario, lo denunciaré y también iré a las redes sociales... Suficiente, es suficiente”, decía la comunicación, en la que se titulaba en letras grandes: Mensaje importante.

“Esto es increíble, te quieren decir cómo vivir en tu propia casa”, escribió una de las personas que compartió su posición. | Foto: yulkapopkova

Una vez más, la carta fue compartida en redes sociales, donde las respuestas estaban divididas. Mientras que algunos criticaron a quien compartió la carta, otros también se pusieron de su lado afirmando que tenían derecho a realizar barbacoas y asados y compartir esos momentos especiales.

“Esto es increíble, te quieren decir cómo vivir en tu propia casa”, escribió una de las personas que compartió su posición. Mientras que alguien más compartió: “Ok veganos ¿Qué tal si cierran sus ventanas? Problema resuelto”.

Mientras que alguien más escribió: “¡Ambos están equivocados! ¡Es una pena que esta sea nuestra sociedad ahora sin comunidad! Si le pides a alguien que cierre su ventana, solo cierra la tuya. No puedes decirle a otra persona cómo vivir su vida o qué hacer, tú haces los cambios por ti mismo. Si tu vecino te ha preguntado amablemente algo con lo que no estás de acuerdo, háblalo respetuosamente como un adulto”.

Otras personas detallaron en otros aspectos: “Si alguien pudiera hacer entender a la familia vegana que el olor suele ser de las especias y no de la carne”, escribió una persona.

Mientras que una internauta propuso una solución para la familia vegana: “Necesitan darse cuenta de que son minoría y deberían invertir en un purificador de aire (recomiendo el modelo de 900 dólares como el que tengo en mi apartamento de Airbnb)”.