Las autoridades electorales suspendieron las elecciones generales de este domingo, 2 de junio, en dos municipios del sur de México, tras hechos violentos que impidieron instalar las casillas de votación, según informó una fuente oficial.
La medida afecta a las localidades de Pantelhó y Chicomuselo, en Chiapas (sureste), donde se “determinó no realizar elecciones” ante “la situación de violencia e ingobernabilidad”, señaló en un comunicado el Instituto de Elecciones (IEPC), de ese estado limítrofe con Guatemala.
La autoridad electoral citó “actos de violencia” como el ocurrido la mañana del viernes 31 de mayo, cuando desconocidos quemaron papelería para los comicios en instalaciones del IEPC en Chicomuselo.
Los funcionarios electorales destacados en ese municipio, que es disputado por dos carteles del narcotráfico, también denunciaron amenazas. El pasado 14 de mayo, en un sector de Chicomuselo fueron localizados los cuerpos sin vida de once personas, entre ellas dos catequistas de la Iglesia católica.
En el caso de Pantelhó, las autoridades electorales señalaron que ante la presencia de presuntos criminales armados, ha sido imposible convocar y capacitar a ciudadanos para que se encarguen de recibir el voto.
La violencia recrudeció en Chiapas incluso antes del proceso electoral por disputas entre los carteles Jalisco Nueva Generación (CJNG) y el de Sinaloa, las dos mayores bandas criminales de México.
La campaña electoral deja unos 25 aspirantes asesinados desde septiembre pasado, entre ellos al menos tres en Chiapas. En una carretera de ese estado, el 21 de abril, fue brevemente retenida por hombres encapuchados la candidata presidencial oficialista y puntera en las encuestas Claudia Sheinbaum.
Desde diciembre de 2006, cuando el gobierno federal lanzó una polémica ofensiva militar antidrogas, se contabilizan más de 450.000 asesinatos y unos 100.000 desaparecidos en México, según cifras oficiales.
Un candidato a edil fue asesinado en el estado de Puebla a menos de 48 horas de que comiencen las lecciones generales en México, marcadas por el asesinato de más de 20 candidatos, informaron autoridades locales.
La campaña de las elecciones del domingo, en las que se eligen presidente, legisladores federales, nueve gobernadores y más de 20.000 cargos locales, ha estado marcada por una ola de ataques contra los candidatos y que ha repuntado en la última semana.
El gobierno federal informó de 22 aspirantes asesinados hasta el pasado martes 28 de mayo. Desde entonces, se registraron tres muertes de candidatos más.
La organización Data Cívica reporta una treintena de homicidios de aspirantes desde que comenzó la campaña el 23 de septiembre. El miércoles cerraron los actos proselitistas para los comicios del próximo domingo, en los que unos 100 millones de mexicanos –de una población de 129 millones– están habilitados para votar.
*Con información de la AFP.