Un autobús escolar se incendió este martes cerca de Bangkok causando varios muertos, según las autoridades tailandesas que temen que haya una veintena de personas fallecidas.
Varias horas después del accidente, los socorristas continuaban trabajando alrededor y dentro del autobús calcinado. El estado de los cuerpos de las víctimas, que quedaron atrapadas entre las llamas, complicó las labores de identificación, que podrían durar días, y retrasó la difusión de un primer balance oficial.
El ministro del Interior, Anutin Charnvirakul, indicó que 23 de los 44 pasajeros estaban desaparecidos y que probablemente estaban muertos. Las otras 21 personas lograron escapar del incendio, precisó.
“Algunos de los cuerpos recuperados eran muy, muy pequeños. Debían de ser muy jóvenes”, indicó Piyalak Thinkaew, jefe del equipo de socorristas desplazados al lugar. “El instinto de los niños fue escaparse por la parte de atrás del autobús, y es ahí donde se encuentran los cuerpos. [...] Las quemaduras hacen que la identificación de las víctimas sea difícil”, precisó.
El autobús transportaba a escolares de la provincia de Uthai Thani, en el norte, que realizaban un viaje a la región de Bangkok.
El accidente se produjo debido a un pinchazo, que hizo que el autobús se estrellara contra una barrera, y afectó a los depósitos de gas comprimido, provocando el incendio, indicaron los rescatistas. “Como madre, me gustaría enviar mi más sincero pésame a las familias de los heridos y muertos”, escribió en X la primera ministra, Paetongtarn Shinawatra, quien habló de “muertos y heridos” sin precisar una cifra.
“El ministro del Interior, Anutin Charnvirakul, había dicho anteriormente que se temía que hubieran muerto 25 personas. Sin embargo, Piyalak Thinkaew, un rescatista de la organización benéfica Fundación Ruamkatanyu, ha dicho a los medios que se han encontrado dos supervivientes más. Tres profesores y 20 estudiantes seguían desaparecidos. Anutin dijo que el conductor había sobrevivido pero parecía haber huido y aún no podía ser encontrado”, reportó el diario The Guardian.
En imágenes compartidas en redes sociales se pueden ver enormes llamas saliendo del autobús, en una carretera habitualmente muy frecuentada que une Bangkok con sus suburbios del norte.
Los bomberos lograron extinguir el fuego, pero los socorristas tuvieron que esperar a que el autobús se enfriara antes de empezar a recuperar cuerpos, según un rescatista.
Tailandia tiene uno de los peores balances en materia de seguridad vial, debido a malas infraestructuras, vehículos poco seguros y malas prácticas de conducción. Alrededor de 20.000 personas mueren al año en accidentes de carretera en el país, según la Organización Mundial de la Salud.
*Con información de AFP