Taiwán expresó el viernes “sincero dolor y pesar” por la decisión de Nicaragua de romper relaciones con esta isla autogobernada y pasar a reconocer el gobierno comunista de Pekín.

“Expresamos sincero dolor y pesar por la decisión unilateral de Nicaragua de romper relaciones diplomáticas con nuestro país”, indicó en un comunicado el ministerio de Asuntos Exteriores de Taiwán.

El territorio, gobernado de forma democrática, se queda ahora con solo 14 países que reconocen oficialmente su gobierno en vez de las autoridades de Pekín, entre ellos Honduras, Guatemala, Belice o Paraguay.

“Taiwán siempre ha sido un amigo leal y fiable de Nicaragua. Ha habido muchos proyectos de asistencia y cooperación a largo plazo entre ambas partes en desarrollos civiles que trajeron resultados sustanciales”, añade el texto del ministerio.

En un movimiento sorprendente, el gobierno de Daniel Ortega anunció el jueves la ruptura de relaciones diplomáticas con Taiwán y el reconocimiento de Pekín como “el único gobierno legítimo que representa a toda China”, dijo su canciller Denis Moncada.

El gobierno comunista considera Taiwán como parte intrínseca de su territorio y exige a sus interlocutores romper con Taipéi para establecer relaciones diplomáticas con Pekín. En los últimos años, China aumentó su presión militar, política y económica sobre esta isla.

La decisión llega en un momento de creciente tensión entre China y Estados Unidos por Taiwán, pero también tras el endurecimiento de las sanciones estadounidenses contra Ortega, que fue reelecto en noviembre para un cuarto mandato consecutivo con la mayoría de sus rivales presos.

Este mismo jueves, el presidente estadounidense, Joe Biden, advirtió sobre “desafíos continuos y alarmantes” para la democracia en el mundo, durante una cumbre en la que fue anfitrión y en la que no convidó a China, a la que califica como una autocracia.

Por el contrario, sí invitó a Taiwán, una isla con un gobierno de tono occidental, a la que la China continental comunista considera parte de su territorio.

Taiwán había mantenido una fluida cooperación con Nicaragua en campos como la salud, agricultura, tecnología y proyectos sociales, principalmente de vivienda. Varias empresas de maquila de origen taiwanés operan en el país desde finales de la década de 1990, generando empleo.

Al llegar al poder en el 2007, el exguerrillero Ortega del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN, izquierda) expresó su deseo de establecer relaciones con China y Taiwán al mismo tiempo, “sin condiciones excluyentes”.

Durante el primer gobierno sandinista (1979-1990), Nicaragua estableció relaciones con China en 1985, pero fueron suspendidas durante la administración de la expresidenta Violeta Chamorro (1990-1997), que hizo lazos con Taiwán, los que se mantuvieron de forma ininterrupida hasta la fecha.

Los otros miembros de Naciones Unidas con los que mantiene relaciones son Paraguay, de Sudamérica; Haití, San Cristóbal y Nieves, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas, del Caribe; Islas Marshall, Nauru, Palau, Tuvalu, de Oceanía; y Eswatini, de África.

La creciente tensión entre ambos países ha incrementado luego de que en marzo de este mismo año el presidente chino, Xi Jinping, le dijo al Ejército Popular de Liberación (EPL) que se prepare para el combate y para defender la soberanía y seguridad nacional.

“Todo el Ejército necesita fortalecer su desempeño para hacer un buen trabajo para asegurar un buen comienzo del 14 Plan Quinquenal y celebrar el centenario de la fundación del partido”, dijo Xi al EPL y a líderes de la Policía Armada Popular (PAP).

Algunos observadores y analistas internacionales están preocupados de que el mensaje del mandatario chino sea la antesala de una invasión por parte de China a Taiwán, a la que el gigante asiático considera una provincia rebelde.

*Con información de la AFP.