El ministro de Relaciones Exteriores catarí realizó este domingo una breve visita en Afganistán, la más importante a nivel diplomático tras la toma del poder de los talibanes, según comprobó un periodista de la AFP.

Mohammad bin Abdulrahman al Thani, que también ejerce como vice primer ministro del emirato, se reunió en Kabul con varios dirigentes talibanes, anunció una cuenta en Twitter de los talibanes, sin dar más detalles.

El jefe de la diplomacia de Catar, un intermediario clave en los asuntos de Afganistán, también habló con el expresidente afgano Hamid Karzai, según fotografías publicadas en las redes sociales.

Así lo confirmó el portavoz talibán Bilal Karimi, quien dijo que “el ministro de Asuntos Exteriores de Qatar, Mohammed bin Abdul Rahman Al Thani, llegó a Kabul y se reunió con la cúpula del Emirato Islámico de Afganistán en el palacio presidencial”.

El funcionario talibán publicó en Twitter imágenes de la reunión, en la que se ve a Al Thani y al nuevo primer ministro afgano Mullah Mohammad Hassan Akhund, mientras que fotografías de él con el expresidente Hamid Karzai circulaban en las redes sociales.

En la reunión estuvieron también presentes otras importantes personalidades del poder talibán, como Sirajuddin Haqqani, el nuevo ministro del Interior afgano, o el ministro de Defensa, el mulá Yaqoob Mujahid.

“Esta tarde, el primer ministro, Alhaj Mullah Mohammad Hassan Akhund, se reunió con el vice primer ministro y ministro de Relaciones Exteriores de Qatar, Mohammad Bin Abdul Rahman, y el emir de Qatar, Sheikh Mohammed Ibn Ahmad Al-Musnad, y su delegación acompañante. Maulvi Abdul Salam Hanafi, viceministro principal, estuvo presente en la reunión”, señaló.

Catar ha tenido un rol diplomático de gran importancia sobre la situación en Afganistán, al haber acogido las negociaciones entre los talibanes y la administración estadounidense, y luego con el gobierno afgano de Ashraf Ghani, derrocado el 15 de agosto por los insurrectos islámicos.

El emirato también se mostró muy activo en el puente aéreo que permitió evacuar a más de 120.000 extranjeros y afganos tras el regreso al poder de los talibanes.

Catar ha actuado durante mucho tiempo como mediador en Afganistán, organizando las conversaciones de los talibanes con los Estados Unidos bajo el expresidente Donald Trump, y luego con el ahora depuesto gobierno afgano del presidente Ashraf Ghani.

También está apoyando a decenas de miles de afganos que fueron evacuados en las últimas semanas de la ocupación liderada por Estados Unidos mientras se tramitan sus solicitudes de asilo antes de dirigirse a otros países.

Otro portavoz de los talibanes, Naeem Wardak, dijo que “en este encuentro ambas partes trataron las relaciones bilaterales, ayuda humanitaria, el futuro desarrollo económico de Afganistán y las interacciones internacionales con el emirato islámico”.

Talibanes reciben primera visita oficial de un funcionario extranjero tras la toma del poder | Foto: Bilal Karimi, portavoz talibán/Twitter

Según los talibanes, el ministro catarí de Exteriores “felicitó” a la formación islamista por la “conquista” y destacó las buenas relaciones de su país con Afganistán.

De momento, ningún país ha reconocido oficialmente el nuevo gobierno de los insurrectos, que solo contaron con el reconocimiento de Pakistán, Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos durante el régimen ultraconservador que impusieron entre 1996 y 2001.

Mujeres podrán estudiar, pero separadas de hombres

De otra parte, los talibanes anunciaron este domingo que permitirán que las mujeres estudien en la universidad, siempre que lo hagan separadas de los hombres, confirmó el ministro de Educación Superior del nuevo régimen afgano.

“Nuestros combatientes han asumido sus responsabilidades” al recuperar el poder, declaró Abdul Baqui Haqqani en rueda de prensa en Kabul, en la que recalcó la importancia del sistema universitario.

Occidente acusa a los talibanes de querer dejar de lado la educación.

“En adelante, la responsabilidad de la reconstrucción del país recae en las universidades. Y tenemos esperanza, porque el número de universidades ha aumentado considerablemente” en comparación con la época del primer régimen talibán (1996-2001), insistió.

“Esto hace que seamos optimistas para el futuro, para construir un Afganistán próspero y autónomo (...) Debemos hacer un buen uso de estas universidades”, añadió.

También confirmó que el gobierno prohibirá las clases mixtas en las universidades, permitidas por el gobierno derrocado a mediados de agosto.

“No nos plantea ningún problema. Son musulmanes y lo aceptarán. Hemos decidido separar (hombres y mujeres) porque las clases mixtas son contrarias a los principios del islam y de nuestras tradiciones”, dijo.

Según él, la educación mixta fue impuesta por el gobierno prooccidental durante los últimos 20 años, pese a que las universidades pedían clases separadas entre mujeres y hombres.

El nuevo gobierno talibán anunció la semana pasada que les permitiría a las mujeres estudiar en la universidad, bajo condiciones estrictas: que vistan un velo integral y en clases separadas de los hombres o divididas por una cortina si hay pocas chicas.

El anuncio preocupa a algunas universidades, que afirman que no tienen medios materiales y financieros para adaptarse a la separación por sexo y que esto puede alentar a los estudiantes (acostumbrados a las clases mixtas) a irse del país para estudiar en el extranjero.

También preocupa a la UNESCO, que estimó el viernes que el “inmenso” progreso logrado desde 2001 en la educación en Afganistán está en “peligro” con los talibanes y alertó los riesgos de una “catástrofe generacional” que podría afectar al desarrollo del país “durante años”.

Con información AFP