Debido a su ubicación en el norte del subcontinente sudamericano, Venezuela es uno de los países de la región que, al igual que Chile y Colombia, está más expuesto a la ocurrencia de movimientos telúricos, de alta y baja intensidad.
Por lo anterior, es recurrente encontrar reportes que dan cuenta de nuevos temblores, una situación similar a la que se vive en nuestro país en regiones como Santander debido al constante movimiento de las placas tectónicas.
En el caso de Venezuela, la recurrencia en la ocurrencia de temblores se deriva de la confluencia entre placas tectónicas de Sudamérica y del caribe, a lo que se suma la existencia de algunas fallas geológicas conocidas como Boconó, El Pilar y San Sebastián.
Así como en Colombia la entidad encargada de monitorear la actividad sísmica es el Instituto Geológico Nacional, en el caso del vecino país, el encargado es Funvisis (Fundación Venezolana de Investigaciones Sismológicas).
Esta entidad, frecuentemente, y a través de las redes sociales, está informando a la ciudadanía en general, dentro y fuera de su país, sobre la ocurrencia de esta clase de fenómenos naturales.
En el caso de este lunes, 24 de julio, a corte a las 9:00 a. m., no se han presentado aún sismos en el territorio de Venezuela, reportando tranquilidad que se ha extendido en al menos los últimos dos días.
Sobre el más reciente registro sismológico reportado por el Funvisis, este da cuenta de un suceso ocurrido el pasado 22 de julio a las 4:50 p. m.
Sobre este movimiento en particular, las autoridades han reportado que tuvo una intensidad de 3.1 grados en la escala sísmica y su epicentro se ubicó a apenas 29 kilómetros al sur de la localidad de Güiria.
Un aspecto particular sobre este sismo es que habría sido perceptible debido a que su profundidad fue superficial, lo que significa que el movimiento se registró cerca a la corteza terrestre.
En este caso, el sismo se registró a apenas 32,5 kilómetros de profundidad.
La zona de ocurrencia de este sismo es marítima, por lo que no derivó en daños ni alertas para los ciudadanos, destacándose a su vez el peligro de un eventual tsunami, en tanto su intensidad no reviste peligro.
Sobre sismos de una ‘mayor intensidad o magnitud’, que se han registrado o sentido en los últimos días en territorio venezolano, autoridades internacionales en la materia han referido el ocurrido el pasado 21 de julio en territorio colombiano.
Dicho sismo alcanzó una intensidad de 4,4 grados y tuvo como epicentro un punto ubicado a 12 km de Piedecuesta, Santander.
El sismo ocurrió a las 7:35 p. m. hora local.
En cuanto al sismo más reciente reportado este 24 de julio por el Servicio Geológico Nacional de Colombia, se trata de un evento ocurrido precisamente en el departamento de Santander, el cual ocurrió a las 1:34 a. m., con una intensidad de 3,4 grados en la escala sísmica y el cual no generó ningún tipo de afectaciones.
El epicentro de este movimiento telúrico se situó en el municipio de Los Santos y su profundidad se calcula en 154 kilómetros.