Un buque de guerra estadounidense y varios barcos comerciales fueron atacados hoy domingo 3 de diciembre en el mar Rojo, según informó el Pentágono, en una posible escalada marítima derivada de la guerra entre Israel y Hamás. El Carney es un destructor tipo Arleigh Burke.
“Estamos al tanto de reportes de ataques contra el USS Carney y buques comerciales en el mar Rojo y daremos más información tan pronto esté disponible”, indicó el Pentágono.
Las fuerzas británicas habían reportado previamente que pareció haber un ataque con drones y explosiones en el mar Rojo, sin dar detalles, el Pentágono tampoco identificó de dónde habría venido el ataque, sin embargo, los rebeldes hutíes de Yemen, apoyados por Irán, declararon que habían atacado dos barcos frente a las costas del país y agregaron que los navíos “israelíes” fueron atacados por la guerra en la Franja de Gaza.
En un comunicado publicado en las redes sociales, los hutíes afirmaron que llevaron a cabo una “operación contra dos barcos israelíes en el estrecho de Bab el Mandeb”, que conecta el mar Rojo con el golfo de Adén.
Un funcionario estadounidense, que habló a condición de anonimato, dijo que el ataque empezó aproximadamente a las 10:00 a. m. en Saná, la capital de Yemen, y duró hasta unas cinco horas. No hubo comentario inmediato de los hutíes. Sin embargo, un portavoz militar de los hutíes había dicho antes que habría pronto una declaración “importante”.
El comercio naviero mundial ha sido atacado en tiempos recientes a medida que la guerra entre Israel y Hamás amenaza con convertirse en una conflagración regional, a pesar de que una tregua detuvo las hostilidades y permitió que Hamás liberara a algunos rehenes, y que Israel liberara a algunos prisioneros palestinos.
En noviembre, los hutíes tomaron un buque de transporte vinculado a Israel en el mar Rojo, frente a Yemen. Los rebeldes todavía tienen ese buque en el puerto yemení de Hodeidah. Cayeron misiles cerca de otro buque de guerra estadounidense la semana pasada, que había ido al rescate de otro buque vinculado a Israel, que fue brevemente tomado por asaltantes.
Sin embargo, desde hace tiempo los hutíes no atacan a las fuerzas norteamericanas directamente. En 2016, las fuerzas estadounidenses lanzaron misiles Tomahawk que destruyeron tres instalaciones de radar en un territorio controlado por hutíes, en represalia por cohetes lanzados contra buques estadounidenses, entre ellos el USS Mason.
Fuentes del diario israelí Haaretz han confirmado el ataque contra este carguero y destacan que la compañía británica que lo opera es propiedad de Danny Ungar, hijo del magnate comercial israelí Rami Ungar, otro de cuyos barcos fue interceptado hace dos semanas.
Por su parte, la agencia de Operaciones de Comercio Marítimo de Reino Unido, bajo la dirección de la Marina británica, se ha limitado a constatar “informaciones sobre actividades de aviones no tripulados y una potencial explosión” en las inmediaciones de Bab el Mandeb.
Los hutíes, que controlan gran parte de Yemen e integran un “eje de resistencia” antiisraelí, han lanzado drones y misiles desde el comienzo de la guerra entre Israel y el grupo islamista palestino Hamás en octubre.
Respuesta de Estados Unidos
Los buques de guerra de Estados Unidos han derribado varios drones o misiles lanzados desde Yemen en las últimas semanas y los hutíes uno estadounidense. Los lanzamientos y derribos de drones y misiles están relacionados con la guerra entre Israel y Hamás.
Combatientes del movimiento islamista palestino cruzaron la frontera de Gaza el 7 de octubre y mataron, según las autoridades israelíes, a unas 1.200 personas, en su mayoría civiles.
Israel respondió con una implacable campaña terrestre y aérea en la Franja de Gaza, controlada por Hamás, que, según este grupo, ha causado casi 15.000 muertos, entre ellos miles de niños.
Esas muertes han provocado una ira generalizada en Oriente Medio y aumentado los ataques de grupos armados contra las tropas estadounidenses en la región y contra Israel.
*Con información de AP.