Una toma de rehenes durante varias horas en una sinagoga de Texas terminó con la liberación de todos los rehenes sanos y salvos y con la muerte del sospechoso, indicaron el gobernador y la policía.

Después de unas diez horas de negociaciones, “un equipo de rescate irrumpió en la sinagoga” y liberó a las tres personas que seguían cautivas, explicó en rueda de prensa Michael Miller, jefe de la policía de la pequeña ciudad de Colleyville. Un cuarto rehén había sido liberado horas antes.

“El sospechoso está muerto”, añadió Miller. El agente especial del FBI en Dallas, Matt DeSarno, añadió que los cuatro rehenes, entre los que se encontraba el rabino local Charlie Cytron-Walker, no precisaron de atención médica y pronto se reunirán con sus familias.

“No les hirió de ningún modo”, indicó.

Los periodistas en el lugar informaron de una fuerte explosión y disparos en la sinagoga justo antes de que el gobernador de Texas, Greg Abbott, anunciara en Twitter que “todos los rehenes están vivos y a salvo” a la media noche del sábado.

El secuestro en la Congregación Beth Israel en Colleyville, a unos 40 kilómetros al oeste de Dallas, fue seguido con preocupación por la comunidad judía de Estados Unidos y por el gobierno de Israel.

El presidente Joe Biden también estuvo informado de la situación, indicó la Casa Blanca.

“Liberados los rehenes en sinagoga de Texas. La operación policial concluyó con los cuatro rehenes sanos y salvos y con la muerte del atacante. El presidente Joe Biden celebró su liberación y alertó del incremento del antisemitismo en EE. UU.”, señaló DW Español al publicar un video del hecho.

En otro video publicado por redes sociales se puede ver el momento en que culmina el operativo de recuperaciín de la sinagoga “Ayer un hombre secuestró a varias personas en una sinagoga de Colleyville (Texas) durante más de 10 horas. El secuestrador acabó abatido por un equipo especial del FBI, y pedía la liberación de una pakistaní vinculada a Al-Qaeda. Aquí se puede ver a unos rehenes pudiendo escapar”.

Exigencias de liberación

La alerta saltó por la mañana y rápidamente circularon informes de que se trataba de un secuestro. La cadena ABC News informó que el secuestrador estaba armado y decía tener bombas en varios lugares.

El jefe policial Miller no confirmó este hecho, pero indicó que había “técnicos de explosivos limpiando el lugar”.

Citando a un alto funcionario, ABC reportó que el hombre exigía la liberación de Aafia Siddiqui, una científica paquistaní que en 2010 fue condenada a 86 años de prisión por una corte de Nueva York por el intento de asesinato de oficiales estadounidenses en Afganistán. Ahora se encuentra detenida en una prisión en Texas.

El agente DeSarno del FBI indicó que el sospechoso había sido identificado, pero no indicó quién era ni confirmó sus exigencias. Estas “estaban centradas en una cuestión que no es especialmente amenazante para la comunidad judía”, señaló.

Un hombre armado entró a la sinagoga durante un servicio matutino de Shabat. La policía de Colleyville dijo que el hecho se registró en el bloque 6100 de Pleasant Run Road, donde se encuentra la sinagoga. (Foto de Charles C. Peebles/Anadolu Agency vía Getty Images) | Foto: Gettyimages

Previamente, la cadena ABC había señalado que el hombre aseguraba ser hermano de Siddiqui, aunque luego rectificó que su hermano está en Houston. Algunos expertos señalan que la palabra árabe usada por el secuestrador era figurativa y significaba “hermana” de fe.

El abogado de Siddiqui señaló en un comunicado a CNN que “no estaba implicada en absoluto” en esta situación y que el autor no era hermano de su cliente.

Una transmisión en vivo de la página de Facebook de la congregación durante el servicio matinal del ‘sabbat’ parecía capturar la voz del hombre hablando en voz muy alta, aunque no mostraba la escena en el interior del centro religioso.

En la transmisión podía escucharse a un hombre diciendo: “Pon a mi hermana al teléfono” y “voy a morir”. También decía: “Hay algo que está mal con Estados Unidos”.

“Antisemitismo”

Ellen Smith, miembro de esa congregación que creció yendo a esa sinagoga, dijo en una entrevista a CNN que la situación era “impactante y horrorosa”.

Según ella, la congregación era una comunidad “unida” y el rabino era “el mejor hombre que alguien puede conocer”.

La mujer señaló que el suceso no es una sorpresa. “Los casos de antisemitismo han crecido últimamente”, aseguró.

Por su parte, el presidente Biden se comprometió a “oponerse al antisemitismo y al aumento del extremismo”.

El incidente despertó preocupación entre la comunidad judía y en el gobierno de Israel.

El primer ministro israelí, Naftali Bennet, tuiteó: “Este evento es un claro recordatorio de que el antisemitismo sigue vivo y debe seguir siendo repelido en todo el mundo”. “A la comunidad judía en Colleyville y alrededor del mundo: no están solos, permanecemos unidos junto a ustedes”.

“Nadie debería tener miedo de reunirse en su lugar de rezo”, defendió en tanto en un comunicado el Consejo de Relaciones de la Comunidad Judía. El Consejo de Relaciones Islámico-Estadounidenses condenó el suceso y ofreció asistencia a los líderes judíos de Colleyville.

Con información de AFP