Latinoamérica tuvo una fuerte agenda electoral en 2021, aunque de igual manera se expuso la fragilidad que hay en las instituciones democráticas de estos países.
Al respecto, el Índice que elabora anualmente la revista The Economist, dio a conocer que: “alrededor del 80% de la población de la región vive bajo un régimen democrático, pero solo el 1,3 % (los habitantes de Uruguay y Costa Rica) lo hacen bajo una democracia completa”.
Países como Chile y Honduras han tenido cambios históricos en sus gobiernos, y se celebraron elecciones en Perú y Ecuador, pero según el medio europeo “a los votantes se les presentaron candidatos que representaban agendas muy diferentes, desatando el colapso de la política de centro y la creciente polarización”.
Por lo que si se tiene en cuenta el escepticismo que hay sobre la gestión de las administraciones, el autoritarismo permitido por la pandemia y el desgaste de las instituciones por culpa de “populistas iliberales”, The Economist califica una “mayor rebaja” en las democracias latinoamericanas, frente a las del resto del mundo, en el índice desde que se empezó a publicar en 2006.
Así las cosas, el medio calificó que en Colombia, Chile, Trinidad y Tobago, Jamaica, Brasil, Panamá, Surinam, Argentina, República Dominicana, Guyana y Perú, hay democracias defectuosas.
Mientras que en Paraguay, El Salvador, Ecuador, México, Honduras, Bolivia y Guatemala, se les catalogó como regímenes híbridos.
A su vez Haití, Nicaragua, Cuba y Venezuela se ven como países con regímenes autoritarios.
Colombia recibió reconocimiento de la OEA por fortalecer la democracia juvenil
La juventud de Colombia está dando cada vez más de qué hablar y deja al país en alto en cuanto a temas de liderazgo y ejercicio de la democracia frente a la Organización de Estados Americanos (OEA). Su participación en las elecciones de los Consejos Municipales de Juventudes y el compromiso que muestra con la sociedad, a través del apoyo a los procesos o prácticas organizativas, algunas plataformas y la convicción de cambio frente a los partidos y movimientos políticos, la hacen un referente en Latinoamérica.
El pasado 5 de diciembre se realizaron las primeras elecciones de los Consejos de Juventud, en los que los jóvenes entre los 14 y 28 años pudieron ejercer su derecho al voto y elegir a sus 10.824 representantes. En estos comicios se registraron 523.110 votos por los partidos y movimientos políticos, 269.613 votos por las listas de jóvenes independientes y 134.860 por el sector de procesos y prácticas organizativas.
Además, la paridad de género y la participación femenina sobresalieron en esas elecciones en las que el 52 % de los candidatos fueron mujeres y el 48 %, hombres. Incluso, los menores de edad, entre 14 y 17 años, hicieron historia al representar el 68 % del total de votantes.
Para ese momento, el presidente de la República, Iván Duque, se pronunció afirmando que la democracia colombiana empodera así a los jóvenes, que son activos y participativos. “Qué mejor que hacerlo con una metodología en la que no hay ganadores ni perdedores: más de 41 mil candidatos, más de 7.500 listas cerradas, paritarias, donde el 30 % corresponde a las Plataformas de Juventud”, expresó.
Este 9 de febrero se logró la visibilización de ese proceso que Colombia ha venido realizando para fomentar y fortalecer la democracia juvenil, en particular a través de los consejos municipales de juventudes, pues fue destacada por la OEA luego de que María Juliana Ruiz, primera dama de la Nación, lo presentara en Washington (Estados Unidos) en compañía del consejero presidencial para la Juventud, Juan Sebastián Arango, y la consejera presidencial para la Niñez y la Adolescencia, Carolina Salgado.
Roberto Menéndez, el jefe de la Misión de Apoyo de la OEA al Proceso de Paz en Colombia, resaltó tras el encuentro ese trabajo que ha venido realizando el país con los consejos y sus elecciones, así como reiteró su apoyo para seguir trabajando en acciones que contribuyan al fortalecimiento de esas políticas públicas en todos los territorios nacionales.
“Hemos tenido la oportunidad de escuchar la amplitud y la profundidad que Colombia viene dando a los jóvenes de ese país, con información puntual, actualizada, a detalle, y nos permitió reflexionar en conjunto cómo la Organización de los Estados Americanos puede ampliar y profundizar el acompañamiento y el apoyo que ya venimos dando de la Misión OEA en los territorios”, fueron las palabras de Menéndez.
Y es que la Misión de Apoyo al Proceso de Paz de la Organización de los Estados Americanos se ha caracterizado desde el año 2004, a solicitud del gobierno colombiano, por ofrecer un acompañamiento amplio y flexible a la política de paz en el país, acercándose a los territorios, en especial a los afectados por el conflicto armado, entendiendo las diferentes dinámicas de cada uno.
Así ha creado puentes entre comunidades, instituciones locales y nacionales, contribuyendo así a la generación de ambientes propicios para la construcción de una paz estable y duradera. Y por ello es importante que a través de Menéndez se haya hecho hincapié este miércoles 9 de febrero en el compromiso de esa misión por contribuir al fortalecimiento de la democracia juvenil en los territorios en los que hace presencia.
Por eso mismo, la primera dama de la Nación reiteró que el encuentro fue la oportunidad para visibilizar esas acciones que se han llevado a cabo, con el fin de afianzar ese compromiso que tiene el Estado de trabajar en pro de los jóvenes de Colombia.