Los temblores siguen siendo noticia en el mundo. Este miércoles 8 de febrero, Taiwán fue el epicentro de un movimiento telúrico de 5.4 de magnitud. El epicentro fue a 67,4 kilómetros al noreste de la costa de Hualien. El país ha vivido en el pasado momentos de mucho dolor por cuenta de estas tragedias. Por su posición geográfica, también tiene riesgo de tsunamis. Por el momento, el temblor no deja ningún estrago.
Esta semana, el mundo ha vivido temblores tras el dramático terremoto de Turquía y Siria que ya deja más de 11 mil muertos.
En Estados Unidos y Guatemala se presentaron temblores, aunque de menor magnitud, que, sin embargo, causaron alarma entre la población, teniendo en cuenta que previamente había sucedido el terremoto en Turquía y Siria.
En el caso de Estados Unidos, el epicentro fue en la población de West Seneca, ubicada en el estado de Nueva York y muy cercana a la ciudad de Búfalo, la cual sufrió hace poco las consecuencias de la denominada ‘Tormenta del siglo’.
“Temblor en Nueva York: sismo de magnitud 3,8 sorprende a Búfalo. El terremoto en Turquía está generando fricciones en las placas tectónicas de todo el planeta”, escribió vidaaustera.nft en su cuenta de Twitter, al publicar un video.
El Servicio Geológico de ese país (USGS por sus siglas en inglés) reportó el lunes el temblor a las 7:09 de la mañana (hora del este) con una intensidad de 3,8 en la escala de Richter.
En el caso de Guatemala, se registró un sismo de 4,7 en la escala de Ritcher, pero que se sintió también en países vecinos como El Salvador y México.
Previamente, se sintió otro temblor a 27 km de Jutiapa. El movimiento sísmico tuvo una magnitud de 1,8 y una profundidad de 1 km.
Ese país centroamericano es uno de los más vulnerables a los terremotos debido a su ubicación en el Cinturón de Fuego del Pacífico, la zona con mayor actividad sísmica del mundo.
Según el Departamento de Investigación y Servicios Geofísico de INSIVUMEH, el territorio nacional de Guatemala está repartido en tres placas tectónicas: Norteamérica, Caribe y Cocos.
En Bogotá también se presentó un sismo de 3,7 que se sintió Bogotá y otras zonas del centro del país.
Según el reporte del Servicio Geológico Colombiano, el epicentro del movimiento telúrico se produjo a 11 km del municipio de Pasca, Cundinamarca. Además, se dio a conocer que tuvo una profundidad superficial de menos de 30 km.
De acuerdo con la entidad, el temblor se sintió a las 07:44 hora local del lunes. No se presentó ninguna afectación.
¿Qué está pasando en el mundo?
Lo que primero hay que tener en cuenta es qué es, técnicamente, temblor, sismo y terremoto. “Temblor” y “sismo” son utilizados para referirse a un movimiento de baja magnitud, mientras que todo lo contrario sucede con “terremoto”, que es de gran magnitud.
Y aunque estos fenómenos no pueden predecirse, los expertos han advertido que algunas regiones del mundo son más propensas a sufrir estos fenómenos, debido, esencialmente, a que están ubicados en inmediaciones de placas tectónicas.
Es el caso del Pacífico, especialmente en California, ya que la placa se mete debajo de la placa continental, lo que origina una fricción, y cuando se libera la energía (de ese contacto) ocurren los sismos.
El denominado Cinturón Circumpacífico se extiende por todo el océano, pasa por todo ese límite con el continente Americano (Estados Unidos, México, Chile, Colombia) y llega hasta Japón, Nepal y Nueva Zelanda.
Se extiende a lo largo de las costas de América del Sur, México y California hasta Alaska; después continúa por las islas Aleutianas, antes de dirigirse hacia el sur a través de Japón y las Indias orientales. La mayor parte de la energía sísmica se libera en esta región, libera entre 80 % y 90 % de la energía sísmica anual de la Tierra.
También existe el Cinturón Eurasiático-Melanésico (Alpino-Himalaya), que incluye las cordilleras alpinas de Europa y Asia, conectando con el anterior en el archipiélago de Melanesia. Desde España se prolonga por el Mediterráneo hasta Turquía, el Himalaya y las Indias Orientales.
Esta inmensa falla se produce por las plataformas Africana e India, que se mueven hacia el norte rozando levemente la plataforma Euroasiática. Aunque la energía liberada aquí es menor que en el del Pacífico, a lo largo de los años ha producido devastadores terremotos, como el ocurrido en China en 1976, donde murieron más de 650 mil personas.
Finalmente, una tercera región altamente sísmica la formaría la Dorsal Mesoatlántica ubicada en el centro del océano Atlántico.
No solo placas tectónicas
Aunque es la principal causa de temblores y terremotos, no es la única. Los expertos han advertido que cualquier proceso que pueda lograr grandes concentraciones de energía en las rocas puede generar sismos.
En estos casos la magnitud dependerá, entre otros factores, de qué tan grande sea la zona de concentración del esfuerzo.
En consecuencia, estos son los principales factores que influyen en la ocurrencia de temblores y terremotos, según el Servicio Geológico de México:
- Tectónica: son los sismos que se originan por el desplazamiento de las placas tectónicas que conforman la corteza, afectan grandes extensiones y es la causa que más genera sismos.
- Volcánica: es poco frecuente; cuando la erupción es violenta, genera grandes sacudidas que afectan sobre todo a los lugares cercanos, pero a pesar de ello su campo de acción es reducido en comparación con los de origen tectónico.
- Hundimiento: cuando al interior de la corteza se ha producido la acción erosiva de las aguas subterráneas, va dejando un vacío, el cual termina por ceder ante el peso de la parte superior. Es esta caída la que genera vibraciones conocidas como sismos. Su ocurrencia es poco frecuente y de poca extensión.
- Deslizamientos: el propio peso de las montañas es una fuerza enorme que tiende a aplanarlas y que puede producir sismos al ocasionar deslizamientos a lo largo de fallas, pero generalmente no son de gran magnitud.
- Explosiones atómicas: realizadas por el ser humano y que al parecer tienen una relación con los movimientos sísmicos.