Obtener la nacionalidad portuguesa y vivir y trabajar en cualquiera de los 27 países de la Unión Europea será una realidad para las personas interesadas, siempre y cuando demuestre su conexión con judíos sefarditas de la península ibérica. Como primer requisito, deberá ser mayor de edad y no tener condenas por crímenes de tres o más años de cárcel.
En entrevista con El Tiempo, Javier Jaramillo, fundador de la empresa colombiana de abogados Pro Corp, explicó que para saber si una persona tiene ascendencia sefardí, deberá acudir a empresas que hacen el estudio de los ancestros. “En el caso de esta empresa debe enviar los nombres de los padres, abuelos, bisabuelos y tatarabuelos, y ellos, como genealogistas certificados, estudian los ancestros para ver si tiene alguna conexión”, dijo al medio mencionado anteriormente.
Además, Jaramillo aclaró que no es necesario que las personas interesadas en adquirir esta nacionalidad deban saber portugués, llevar a cabo algún examen ni viajar a Portugal. También aseguró que existen apellidos comunes, que dan muestras de la ascendencia judía. Estos son: Abrantes, Aguilar, Andrade, Brandão, Brito, Bueno, Cardoso, Carvalho, Castro, Costa, Coutinho, Dourado, Fonseca, Furtado, Gomes, Gouveia, Granjo, Henriques, Lara, Marques, Melo y Prado, Mesquita, Mendes, Neto, Nunes, Pereira, Pinheiro, Rodrigues, Rosa, Sarmento, Silva, Soares, Teixeira y Teles.
“En la diáspora de América Latina, establece el decreto que hubo algunos como: Almeida, Avelar, Bravo, Carvajal, Crespo, Duarte, Ferreira, Franco, Gato, Gonçalves, Guerreiro, Leão, Lopes, Leiria, Lobo, Lousada, Machorro, Martins, Montesino, Moreno, Mota, Macías, Miranda, Oliveira, Osorio, Pardo, Pina, Pinto, Pimentel, Pizarro, Querido, Rei, Ribeiro, Salvador, Torres y Viana”, agregó.
De acuerdo con Jaramillo, una vez se confirme la conexión de la persona interesada con judíos de la península ibérica, este tendrá que pedir un certificado a la comunidad judía de Porto o Lisboa, para posteriormente presentar al Ministerio de Justicia portugués la solicitud para obtener la nacionalidad.
No obstante, cabe resaltar que el Ministerio de Justicia de Portugal cobra 250 euros para llevar a cabo dicho proceso, más gastos adicionales del trámite, es decir, alrededor de $1.100.000.
Entre los beneficios que los colombianos podrán acceder si obtienen nacionalidad portuguesa, dicho medio los clasificó de la siguiente manera:
- Libre circulación dentro de la Unión Europea.
- Viajar, estudiar o trabajar en cualquiera de los 27 países de la Unión Europea.
- Acceso a derechos europeos, es decir, participación en la vida política, junto con pensión y seguridad social, entre otros.
- Se puede mantener la nacionalidad de origen, manteniéndose los derechos en el país de nacimiento o residencia.
- Los ciudadanos portugueses no necesitan visa para ingresar a 83 países, incluido Estados Unidos.
- Existen acuerdos de “no doble imposición”, es decir que la persona nacionalizada puede escoger en qué país pagar impuestos para reducir la carga tributaria.