A las 6:13 minutos de la mañana suena el segundo Tik Tak de hoy miércoles 8 de febrero en SEMANA y suena por los lados del presidente Joe Biden, porque ayer dio su Discurso de la Unión en el Congreso de los Estados Unidos.
En términos generales, le fue bien teniendo en cuenta que no todos los presentes esperaban que el presidente de mayor edad en la historia de Estados Unidos no fuera, a sus 80 años, a patinar de vez en cuando. Algunos observadores le apuestan a varias dosis de botox, pero sin duda con esa o sin esa ayuda se veía con mucha energía el presidente Biden.
Especialmente cuando se apartaba el telepronter y se dirigía directamente retando a quienes lo interrumpían con frases como mentiroso, e incluso con afirmaciones de que estaba hablando con una palabra que empieza por M, pero me da pena decirla acá en esta sección.
También le gritaron “es su culpa”, cuando el presidente habló de la crisis del fentanal, que tantas muertes está causando en los Estados Unidos. Incluso algunos de los presentes se paseó por el recinto con un balón blanco inflado con helio para burlarse del manejo del globo espía chino al que se le permitió pasearse varios días por los cielos estadounidenses, antes de dispararle sobre la costa de Carolina del Sur.
Los analistas sostienen que el discurso de Biden no tuvo grandes nuevas propuestas, pero se le notó que era el discurso de lanzamiento de una reelección. Él más bien se dedicó a resaltar la recuperación de la economía, o sea hacerse propaganda con hitos como la reducción del desempleo, que es cierto, y la disminución de la velocidad inflacionaria, que es cierta.
Llamó a la unidad con los republicanos, no obstante acusarlos de querer acabar con el sistema de salud, pidió la reforma de la Policía con los padres de Tyre Nichols, muerto por una golpiza de agentes en Memphis, presentes en el recinto invitados por la primera dama.
Pidió también varias investigaciones más sobre el cáncer y le habló directamente a los ciudadanos olvidados que están luchando financieramente para sobrevivir por mantenerse, básicamente la clase media de los Estados Unidos.
Finalmente, ganó la veteranía. No en vano, este presidente de 80 años lleva 50 en la política y varios de ellos como congresista, plaza que capotea con bastante confianza, como se notó ayer.