Una familia en Italia está de luto luego de que su bebé recién nacido muriera mientras su madre lo amamantaba, solo horas después de haber tenido trabajo de parto.
La noticia tomó por sorpresa a la madre del menor, quien al despertar luego de tomar una siesta tras más de 17 horas de trabajo de parto, no vio a su pequeño al lado.
“Estaba todavía muy cansada, bastante exhausta por el parto, después de 17 horas de estar dando a luz. [...] Durante dos noches, la que siguió al parto y la siguiente, logré, a duras penas, mantener al bebé cerca de mí. Estaba molesta, pedí ayuda a las enfermeras, preguntándoles si podían cogerlo al menos por un tiempo”, relató la mujer.
Pero agregó que le respondían “que no era posible llevarlo a la guardería”. De repente, prosigue la mujer en su relato, “en medio de la noche, las enfermeras me despertaron: el bebé ya no estaba en la cama conmigo. Sin decirme una palabra, me hicieron levantar y me llevaron a una habitación cercana. Allí me informaron que el bebé estaba muerto”.
Las palabras de la madre fueron recogidas por el diario El Mundo, de España, y señalan al hospital como principal responsable en la muerte del bebé.
Todo ocurrió, al parecer, mientras la madre le estaba dando pecho a su hijo y ella, debido al agotamiento, se quedó dormida y su peso se fue contra el pequeño, dejándolo sin aire.
El hecho ocurrió el pasado 8 de enero. Sin embargo, solo hasta ahora se hace mediático debido a que la familia del menor interpuso una demanda contra el hospital, para esclarecer lo que sucedió y si el personal que la atendió en su momento fue negligente a la hora de estar pendiente de la salud tanto del bebé como de su madre.
La tragedia ocurrió en el hospital Sandro Pertini, de la ciudad de Roma, el cual ahora es investigado por las autoridades para esclarecer lo sucedido y así impartir justicia por la muerte del recién nacido.
Muere bebé en motel de Valledupar
En otro caso que también derivó en la muerte de una menor, y que ocurrió el pasado primero de enero, los empleados de un motel en Valledupar, al norte de Colombia, encontraron el cuerpo sin vida de una bebé al interior de un vehículo, estacionado en el parqueadero.
La noticia trascendió rápidamente luego de conocerse que la menor fue dejada por sus propios padres dentro del automotor, mientras ellos ingresaban a la habitación número 11 de la residencia para, al parecer, celebrar su reconciliación.
Desde ese momento, las primeras versiones apuntaban a que la niña, de siete meses, falleció porque se habría intoxicado con los gases que emanaban del carro.
Una semana después, ese instituto dio a conocer que, en efecto, la pequeña murió por inhalación de monóxido de carbono.
“Seguimos conociendo más detalles. El primero de ellos es que la niña falleció a causa de la inhalación de monóxido de carbono. Estamos esperando los resultados toxicológicos de los padres que nos digan si, en efecto, estos estaban bajo efecto de alguna sustancia psicoactiva”, dijo el secretario de Gobierno de Valledupar, Felipe Murgas.
La teoría señala que el monóxido de carbono es catalogado como un “asesino silencioso”. Además de una falla mecánica, es pertinente conocer que cuando un vehículo está estacionado, con el motor encendido, los gases tienen a colarse en el interior del mismo, provocando la asfixia o intoxicación en la persona.
La acumulación de monóxido de carbono, presente en el motor, es altamente tóxica, ya que compromete la cantidad de oxígeno que llega a la sangre.
Cabe recordar que los progenitores fueron encontrados tendidos en una cama, al parecer, en alto grado de embriaguez. Según se supo después, la madre de la menor era abusada física y psicológicamente por el papá de la niña, quien la habría llevado con amenazas hasta el motel.