Aunque el opositor ruso Alexéi Navalni se encuentra arrestado desde hace hace un par de semanas en Rusia, cumpliendo la parte de una sentencia que se le había impuesto anteriormente, una juez local decidió condenarlo este sábado por “difamación” en contra de un veterano de guerra.

La jueza Vera Akimova señaló en la lectura del veredicto que “Navalni cometió el delito” al haber difundido informaciones “falsas” e “injuriosas” sobre un veterano de guerra que había defendido en un video de campaña un referéndum que reforzó los poderes del presidente Vladimir Putin, a mediados del año pasado.

La Fiscalía exigió que al líder opositor se le impusiera una multa de 950.000 rublos (unos US$12.800) y solicitó que se le aplique una pena condicional para que se convirtiera en prisión firme por “difamación” contra un veterano de la Segunda Guerra Mundial. Navalni había mencionado a través de redes sociales que los participantes en ese video eran “vergüenza de la nación” y unos “traidores”.

El opositor de 44 años sufrió otro revés judicial, luego de que otra corte rechazó su petición de puesta en libertad horas antes.

La victoria soviética sobre los nazis ocupa un lugar central en la consciencia colectiva rusa y es ampliamente celebrada por las autoridades y la población. Las críticas a los excombatientes en general no son bien recibidas, señaló la AFP.

Tribunal Europeo de Derechos Humanos pide liberación de Navalni

El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) le ha pedido a Rusia liberar a Alexéi Navalni, lo que desembocó en un nuevo enfrentamiento entre Europa y Moscú por el destino del opositor más importante del presidente de Rusia, Vladimir Putin.

El Kremlin respondió con una negativa a la solicitud pues, aunque es requisito cumplirlo al formar parte del Consejo de Europa, ha calificado la decisión del tribunal como “una injerencia flagrante y grave a los asuntos judiciales de un estado soberano”.

El líder opositor fue arrestado en el mes de enero, luego de que su avión, proveniente de Alemania, aterrizara en Moscú. Las autoridades rusas lo detuvieron por haber incumplido sus obligaciones de presentarse regularmente ante las autoridades por una condena que recibió en 2014.

Sin embargo, Navalni no se pudo presentar puesto que fue envenenado en Siberia y trasladado de urgencias a Alemania, en donde se recuperó. El acérrimo opositor acusa al gobierno de Vladimir Putin de ser responsable del atentado a su vida.

A pesar de esto, la justicia rusa condenó a dos años y medio de prisión el pasado 2 de febrero, lo que generó protestas multitudinarias en las calles de Moscú y miles de detenidos.

En un fallo publicado el miércoles de la semana pasada, el tribunal le concedió a Navalni una liberación temporal bajo el argumento de que el gobierno “no podía proporcionar suficientes garantías para su vida y salud”. La decisión tomada por el tribunal fue tomada con respecto a los términos del confinamiento, más no una revocación de la condena que recibió en 2014 por malversación de fondos junto a su hermano.

No obstante, esa condena también fue ampliamente discutida por, supuestamente, estar motivada políticamente, a tal punto que el mismo TEDH la consideró “arbitraria e injusta”.

Los jueces del tribunal europeo le preguntaron a Rusia sobre la situación del opositor, su encarcelamiento, si todavía existe riesgo para su vida y si se ha realizado un control individual sobre el trato que ha recibido.

El Gobierno ruso respondió que Navalni se encuentra correctamente vigilado, con videovigilancia en su celda y acceso a comunicación electrónica a través del sistema de la cárcel. Sin embargo, el opositor ha denunciado que no tiene “garantías suficientes” para su vida y salud.