En una rueda de prensa ofrecida en las últimas horas de este lunes, 16 de diciembre, el presidente electo de los Estados Unidos, Donald Trump, volvió a referirse al plan de deportación masiva que tiene preparado tan pronto asuma su cargo para expulsar a los criminales venezolanos que hayan delinquido en territorio norteamericano.

En su primera entrevista formal en televisión, seis semanas antes de su toma de posesión, el magnate republicano ratificó que procederá a una deportación masiva de inmigrantes indocumentados.

“Creo que hay que hacerlo. Es algo difícil, es algo muy difícil de hacer. Pero hay que tener normas, reglamentos, leyes. Entraron ilegalmente”, afirmó en el programa Meet the Press with Kristen Welker, de la cadena NBC.

En ese contexto, se conoció que el próximo presidente de los Estados Unidos amenazó al régimen de Nicolás Maduro después de haber sido preguntado si había sostenido algún tipo de comunicación con el Gobierno venezolano respecto al recibimiento masivo de migrantes expulsados del país norteamericano.

“Ellos los llevarán de vuelta. Todos se los llevarán de vuelta. Y si no lo hacen, serán enfrentados económicamente muy fuerte”, afirmó Trump.

Trump, que asumirá la Presidencia de Estados Unidos el 20 de enero, ha reiterado su intención de llevar a cabo un programa masivo de deportaciones de migrantes irregulares.

Durante la campaña de las presidenciales de noviembre, el republicano hizo uso de una feroz retórica contra los migrantes, a los que culpó de una supuesta ola de delincuencia. Trump se refirió, en su momento, al Tren de Aragua, “una de las bandas de inmigrantes más mortíferas y despiadadas”, de origen venezolano y que opera en varios países suramericanos y recientemente en Estados Unidos.

El plan de deportación de Trump podría significar que los inmigrantes sean desplazados permanentemente a países con los que no tienen vínculos.

Migrantes esperan en fila junto a la valla fronteriza bajo la vigilancia de la Guardia Nacional de Texas para ingresar a El Paso, Texas, el 10 de mayo de 2023. | Foto: Copyright 2023 The Associated Press. All rights reserved.

Las autoridades del estado de Texas le ofrecieron a Trump más de 500 hectáreas de terreno cerca de la frontera con México para construir centros de detención de migrantes, en el marco de sus políticas de deportación masiva una vez tome posesión a partir del mes de enero.

El terreno, ubicado en la ciudad de Río Grande, fue comprado por las autoridades estatales el 23 de octubre para construir un muro en la frontera con México, si bien el anterior dueño se negó a permitir su construcción, según ha recogido la cadena ABC News.

Finalmente, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, aseguró que intentará cerrar un acuerdo con el presidente electo de Estados Unidos para enviar a personas migrantes a sus países de origen sin que tengan que pasar por territorio mexicano, en caso de que se materialice su polémico plan de deportaciones masivas.

Las imágenes corresponden al interior del hotel Gateway, donde se registró la presencia de miembros del Tren de Aragua en Estados Unidos. | Foto: X/@liquidnewsfeed

“Evidentemente, nosotros somos solidarios con todos y con todas, pero nuestra principal función es recibir a las y los mexicanos, y esperamos tener un acuerdo con la Administración Trump en caso de que haya estas deportaciones”, señalo Sheinbaum en una rueda de prensa.

*Con información de Europa Press.