A 19 días del día de las elecciones presidenciales en los Estados Unidos, Donald Trump y su rival demócrata Joe Biden, quien actualmente lidera los sondeos, disputaron la audiencia de dos eventos televisados simultáneamente. No fue un debate, pero sí surgieron muchas preguntas, las cuales generaron que Trump se mostrara enfadado, molesto, sobre el por qué usaba tan poco el tapabocas, teniendo en cuenta que recientemente fue diagnosticado con coronavirus. Por el contrario, su rival demócrata respondió a las preguntas de la audiencia en un tono mucho más tranquilo.

El debate inicialmente previsto para este jueves fue cancelado tras la negativa de Trump de participar en forma virtual, no obstante es espera por un último duelo televisado, el cual está programado para el 22 de octubre en Nashville, Tennessee.

Ante la anulación del debate, ambos candidatos aparecieron en foros televisados al mismo tiempo, pero en canales diferentes. El evento de Trump en Florida fue transmitido por NBC, mientras que el de Biden fue desde Pensilvania a través de ABC.

El duelo

En medio del evento televisado en la cadena NBC, el presidente estadounidense Donald Trump aprovechó para defender su gestión de la pandemia a pesar del reciente aumento de los casos de contagio en el país. “Estamos llegando al final”, dijo Trump. “Hemos hecho un trabajo fantástico (...) Las vacunas están llegando y los tratamientos están llegando”.

Sin embargo, para su rival Joe Biden, quien participó simultáneamente en un foro transmitido por otra cadena, el mandatario no ha hecho “nada”. “Estamos en una situación en la que tenemos más de 210.000 muertos y ¿qué hace? Nada”, dijo casi al mismo tiempo el candidato demócrata, en la cadena ABC.

Por otro lado, el mandatario republicano se negó a condenar explícitamente el movimiento conspirativo “QAnon”. “No sé nada de QAnon”, señaló, para luego asegurar que estaba de acuerdo con sus posiciones “contra la pedofilia”. Contrario a él, su rival demócrata destacó que para restaurar la “cortesía y el honor” en la política estadounidense se debe escuchar al otro”.

“Lo que voy a hacer, si soy elegido presidente, primero, y no es broma (...) será llamar” le dijo Biden a los republicanos, recordando su reputación, cuando fue senador por más de 35 años, de ser un hombre capaz de traspasar barreras partidarias.

Florida y Pensilvania

La campaña volvió a trastornarse por el coronavirus. La candidata demócrata a la vicepresidencia, Kamala Harris, suspendió sus viajes de campaña hasta el domingo “por precaución” debido a dos casos de la covid-19 en su entorno.

Biden decidió, por recomendación de sus médicos, no interrumpir sus desplazamientos a pesar de otro caso descubierto en la tripulación de su avión, pero que permaneció “a más de 15 metros” y tenía, como el candidato, un tapabocas. “Que esto sirva de ejemplo sobre la importancia de usar tapabocas y de mantener una distancia física segura”, tuiteó Biden, que este jueves volvió a dar negativo.

Estos dos estados, considerados clave para ganar los comicios del 3 de noviembre, le reportaron victorias a Trump en 2016, pero en ambos Biden encabeza ahora la intención de voto.

Unas horas antes de aparecer en escena, Trump marcó el tono, agresivo y burlón. “Me gustaría ver si puede llegar hasta el final”, dijo el presidente de 74 años, al aludir a su rival tres años mayor cuya vitalidad suele poner en duda y a quien apodó “Joe el Dormido”.

“Buena chance”

Las encuestas son preocupantes para Trump en esta campaña plagada de sobresaltos y cuando más de 17,5 millones de estadounidenses ya han votado anticipadamente. Los demócratas tienen “buena chance” de ganar la Casa Blanca, reconoció el jueves el senador republicano Lindsey Graham, muy cercano a Trump.

Su colega Ted Cruz, exrival de Trump en las primarias republicanas de 2016 y convertido ahora en uno de sus aliados, ya admitió la semana pasada estar “preocupado” por lo que podría ser un “baño de sangre” de proporciones históricas para los republicanos, que además del control de la Casa Blanca aspiran retener su mayoría en el Senado.

Biden lidera por casi 10 puntos porcentuales el promedio de los sondeos nacionales. Y aventaja a Trump por unos 5 puntos en los “campos de batalla”, los estados que por su peso electoral pueden definir la contienda.

Trump, recuperado de la covid-19, del cual dijo que es “inmune”, intensificó su campaña, rodeándose cada noche de miles de simpatizantes con gorras rojas en estados clave. En Florida, Pensilvania y Iowa encadenó tres mitines en tres días y celebró un cuarto el jueves en Carolina del Norte.

Los foros de este jueves en NBC y ABC fueron en formato “ayuntamiento” (town hall), una tradición estadounidense que implica que el candidato es interrogado en vivo en televisión por un panel de votantes, bajo la supervisión de un moderador.

¿Quién habrá generado mayor audiencia? David Canon, profesor de ciencias políticas en la Universidad de Wisconsin, había anticipado no tener duda: el “town hall” del tempestuoso presidente atraerá más televidentes. “La gente adora el drama”, dijo a AFP.

*Con información de AFP