Cuba saldrá de la “situación compleja” en la que se encuentra, prometió el presidente Miguel Díaz-Canel, al cumplirse un año de las históricas protestas contra el Gobierno. Las calles de La Habana lucían este lunes en calma, pero varios disidentes denunciaron haber sido impedidos de salir de sus casas.
“De esta situación compleja también vamos a salir. Y vamos a salir revolucionando”, porque “la Revolución ha estado revolucionándose siempre, y lo ha hecho en un escenario de constante asedio económico, político e ideológico”, aseguró Díaz-Canel en Twitter. “Si hay algo que conmemorar este 11 de julio es la victoria del pueblo cubano, de la Revolución cubana”, añadió el mandatario.
El 11 y 12 de julio de 2021 se registraron las mayores manifestaciones desde el triunfo de la Revolución cubana en 1959, cuando miles de personas se lanzaron a las calles en cerca de 50 ciudades del país al grito de “Libertad” y “Tenemos hambre”, cuando recrudecía la crisis económica que enfrenta la isla, la peor en tres décadas.
La tranquilidad reinaba este lunes en calles de La Habana, pero una fuerte presencia de agentes de seguridad vestidos de civil pudo observarse desde el fin de semana en algunos puntos neurálgicos de la ciudad, y el temor a que pudieran registrarse nuevas revueltas estaba latente.
“Sí, siento temor, porque algo tiene que pasar, ya que esto está muy duro y no se le ve la punta por ningún lado”, declaró a la AFP la cartomántica María de los Ángeles Márquez, de 64 años, en un parque próximo al Capitolio Nacional, uno de los principales escenarios de las manifestaciones del año pasado.
“No hay quien lo tumbe”
Más de 15 disidentes, artistas o periodistas independientes, e incluso padres de personas detenidas por las manifestaciones, denunciaron haber sido advertidos por la Policía de no salir de sus casas. Algunos tenían patrullas afuera de sus domicilios.
“Piensan que con 2 patrullas me van a callar, pues están muy equivocados”, tuiteó el domingo Yurka Rodríguez, madre de Yunaikis Linares, una joven manifestante condenada a ocho años de prisión. “Me tienen sitiada”, agregó.
Opositores al Gobierno llamaron los últimos días en redes sociales a conmemorar la fecha con nuevas protestas, pero muchas de las voces que se dieron a conocer con las manifestaciones de hace un año marcharon al exilio y algunos están en la cárcel.
La ONG Human Rights Watch denunció este lunes un “plan” del Gobierno de Cuba para impedir manifestaciones, castigar a quienes participen e “infundir temor” para evitar nuevas protestas contra el régimen, en un informe donde documenta 155 casos de abusos a raíz de las protestas del año pasado.
Como muchos cubanos, el estudiante Carlos Rafael Domínguez veía poco probable que pudiese producirse alguna manifestación para conmemorar el aniversario de las protestas, que dejaron un muerto, decenas de heridos y más de 1.300 detenidos, según la ONG de derechos humanos Cubalex, con sede en Miami
“Nadie va a salir a la calle”, porque “esto no hay quien lo tumbe”, dijo el joven de 18 años. Márquez dice que “la gente se ha aguantado mucho (de salir)” por las fuertes condenas impuestas a los participantes en las protestas.
Según el Gobierno, 790 prisioneros fueron encausados y 488 recibieron sentencia definitiva, muchos por el delito de sedición con penas de hasta 25 años de cárcel.
“Frente a los regímenes así estructurados solo cabe la sorpresa cívica de la ciudadanía, la espontaneidad civil”, opinó el opositor cubano Manuel Cuesta. “Lo importante ahora mismo es que el divorcio que se abisma entre la sociedad y el Gobierno ya tiene fecha simbólica: el 11j. Y el malestar social crea nuevas fechas”, agregó a la AFP.
*Con información de la AFP.