Apenas una semana después de haber llegado a la Casa Blanca, Donald Trump sufrió su primer revés ante los tribunales, cuando una juez federal bloqueó este sábado parte de su decreto para impedir el ingreso de musulmanes a Estados Unidos."¡¡¡¡¡¡Victoria!!!!!!", tuiteó la Unión estadounidense de Libertades Civiles (ACLU), cuyos abogados demandaron ante la justicia al gobierno para evitar la aplicación de un decreto contra los refugiados y migrantes musulmanes, tras la decisión de la jueza Ann Donnelly.

Trump firmó el viernes el decreto que suspende la acogida de refugiados musulmanes durante 120 días, mientras se concreta el futuro sistema de verificación de visas, así como el ingreso de viajeros procedentes de países de mayoría musulmana -Irán, Irak, Libia, Somalia, Sudán, Siria y Yemen- por 90 días. Numerosas asociaciones empezaron a denunciar de inmediato la medida y su carácter discriminatorio.La magistrada ordenó a las autoridades no deportar a ningún ciudadano de los siete países mencionados que posean papeles en regla para ingresar a Estados Unidos, a los que otorgó permanencia temporal.La decisión "muestra que cuando el presidente Trump adopta leyes o decretos inconstitucionales e ilegales, allí están los tribunales para defender los derechos de todos", dijo el director de ACLU, Anthony Romero, a la salida de la audiencia.Pese a que el asunto está lejos de estar terminado y que una nueva audiencia tendrá lugar en febrero, "es importante que ninguna persona va a ser devuelta al avión", dijo Lee Gelernt, abogado de la organización.Asimismo, indicó que la jueza ordenó al gobierno comunicar la lista de todas las personas retenidas en los aeropuertos del país desde la noche del viernes.Según ACLU, entre 100 y 200 personas han sido detenidas a su llegada a aeropuertos de Estados Unidos desde que Trump firmó la orden, si bien el Gobierno no ha confirmado esas cifras.La juez concluyó que aplicar el mandato del presidente con el envío de esas personas a su países podría causar un "daño irreparable", informaron los medios locales.Con todo, Donnelly no se pronunció sobre la constitucionalidad de la medida y fijó una audiencia para el 21 de febrero para volver a abordar el caso.La movilización relámpago y la demanda interpuesta el sábado tras la detención de inmigrantes musulmanes en aeropuertos de Estados Unidos demostró que las organizaciones defensoras de los derechos de los migrantes pelearán con firmeza contra los decretos de Trump."Es la primera salva dentro de una larga batalla frente a los tribunales", consideró Michael Kagan, especialista en derecho de la inmigración de la Universidad de Nevada."Desde la elección nos preparamos para una guerra en las trincheras de los tribunales. Hubo muchas especulaciones sobre lo que Trump realmente quiso decir, si los tecnócratas del gobierno lo iban a moderar (...) parece que está haciendo literalmente lo que dijo que iba a hacer".Para este jurista, la conclusión de ésta batalla legal es incierta porque es algo "sin precedente en la historia reciente estadounidense". Por lo pronto, los defensores de los inmigrantes ya se anotaron su primera victoria.*Con AFP y EFE