Daniel Sancho tenía programada para este jueves la audiencia en la que el tribunal de Samui (sur de Tailandia) iba a escuchar a la Fiscalía y a la defensa del chef español, para luego dar un fallo condenatorio. Sin embargo, una petición del confeso asesino de Edwin Arrieta cambió todo.
Daniel Sancho solicitó al juez un traductor en español, pues es su idioma nativo. Tras varias horas de búsqueda, no fue posible encontrar a alguien que pudiera de manera presencial. Por esa razón, el juicio fue aplazado para el próximo 13 de noviembre.
En la audiencia de este jueves, la Fiscalía iba a entregar todas las pruebas que recopiló en contra de Sancho y por las que decidió acusarlo de asesinato premeditado, delito que se paga con pena de muerte en el país asiático.
En el último escrito que presentó la Policía ante la Fiscalía sostuvieron que Daniel destruyó, enterró y ocultó el cuerpo de Edwin Arrieta, insistiendo en que hubo premeditación por parte del cocinero español.
A Sancho, que estaba sin abogado desde hace varias semanas, le asignaron al jurista Krit Sudthanom, quien lo defenderá.
En este tiempo, la defensa de Sancho se concentró en España, desde donde vienen trabajando para demostrar que no hubo la premeditación que afirman la Policía y la Fiscalía. Los encargados de ese trabajo son los abogados Carmen Balfagón, Ramón Chipirrás y Marcos García Montes.
Incidiendo en la profesión de chef de Daniel -han presentado incluso las pruebas de que se tituló en la prestigiosa escuela Cordon Bleu en 2017- y en su pasión por la cocina tailandesa, la defensa del joven mantiene que los utensilios que adquirió eran para cocinar.
Lo anterior puesto que el bungalow donde se alojaba cuenta con cocina y la sierra que compró es la que normalmente se usa en Tailandia para cortar cocos y otras frutas típicas del país; el cuchillo, por su parte, sería del mismo tipo que el cocinero utilizaría para desarrollar su profesión en España.
Además, el dosier de los abogados apuntan que las bolsas de basura verdes en las que presuntamente Daniel metió los restos de Edwin Arrieta no coincidirían con el modelo y la marca de la tienda donde las compró.
El objetivo de la familia de Daniel Sancho es que el joven no sea condenado a pena de muerte, sino que lo cobijen con una reducción de la pena o que lo extraditen a España.