Una adolescente de Reino Unido que asesinó a su bebé momentos después de dar a luz en la casa de sus padres, cuando solo tenía 15 años, ha sido encarcelada por 12.

Paris Mayo lloraba en el banquillo cuando un jurado emitió su veredicto después de más de ocho horas de deliberación este lunes 26 de junio, encontrándola culpable de asesinar al pequeño Stanley Mayo.

Fue juzgada y declarada culpable el viernes de provocarle fracturas de cráneo complejas al bebé poco después de dar a luz en Ross-on-Wye, Herefordshire, en marzo de 2019.

Se le argumentó al jurado acusaciones angustiosas sobre la muerte de Stanley, incluido que Mayo, ahora de 19 años, pero de 15 en ese momento, rellenó la boca del bebé con algodón, y se encontraron pedazos en su garganta.

Ella lloró en el banquillo de los acusados después de que el jurado de la corte de Worcester Crown deliberara durante ocho horas y 38 minutos para encontrarla culpable del asesinato de su hijo Stanley.

Al encarcelarla por un mínimo de 12 años antes de que pueda solicitar la libertad condicional, el juez Garnham dijo que era un caso “triste y terrible”. | Foto: Bill Oxford

El tribunal escuchó a Mayo, quien le dijo a la policía que ella “besó al bebé en la frente” antes de “colocarlo suavemente” en una bolsa de basura.

En el juicio también se escuchó que Stanley había estado vivo durante poco más de dos horas, a pesar de que Mayo le dijo a la policía que nunca había mostrado signos de vida.

Se alega que Mayo ocultó tanto su embarazo como el hecho de que dio a luz al bebé Stanley, lo que hizo sola y sin ayuda en una sala de estar, alegando que ni siquiera sabía que estaba embarazada cuando solo tenía 14 años.

El jurado escuchó previamente que la mañana después del nacimiento, Mayo envió un mensaje de texto a su hermano George que decía: “Cuando salgas, ¿puedes poner la bolsa negra en la papelera, ya que está llena?, ¿por favor?”.

El señor Mayo declaró previamente que recogió lo que resultó ser una bolsa de plástico negra manchada de sangre y la encontró “inusualmente pesada”, observada por la madre desprevenida de Mayo.

El señor Mayo declaró previamente que recogió lo que resultó ser una bolsa de plástico negra manchada de sangre y la encontró “inusualmente pesada”, observada por la madre desprevenida de Mayo. | Foto: Libre de derechos

Al ver lo pesada que era, su madre se vio obligada a mirar adentro y, al encontrar al niño muerto, inmediatamente llamó al 999.

El abogado defensor Bernard Richmond dijo este lunes al tribunal que la madre de Mayo no estaba en la sala del tribunal porque “no podía soportarlo”.

Richmond dijo que el padre de Mayo tenía una enfermedad terminal y murió desde entonces, pero antes de estar enfermo, era “difícil y emocionalmente cruel con ambas” y su “madre estaba bajo la presión más considerable”.

El abogado defensor Bernard Richmond dijo este lunes al tribunal que la madre de Mayo no estaba en la sala del tribunal porque “no podía soportarlo”. | Foto: run co

Hablando con Mayo durante la sentencia, el juez dijo: “Sorprendentemente, a pesar del dolor, no gritaste”. “Tu reacción a lo que había sucedido fue, desde cualquier punto de vista, sorprendente”.

Al encarcelarla por un mínimo de 12 años antes de que pueda solicitar la libertad condicional, el juez Garnham dijo que era un caso “triste y terrible”.

Él manifestó: “No hiciste nada para prepararte para dar a luz. Estabas asustada y traumatizada por este evento”.

“No tengo dudas de que fue doloroso y abrumador para ti. Parece que no gritaste, tan ansiosa estabas por no molestar a tus padres arriba. Tan pronto como nació Stanley, decidiste que no podía vivir y lo agrediste en la cabeza”, agregó el juez.

“No está claro cómo hiciste esto, pero sospecho que le aplastaste la cabeza, probablemente debajo de tu pie. Ciertamente le causó un daño grave, pero ese asalto no mató a Stanley”.

“Seguía con vida. Decidiste que tenías que acabar con Stanley metiéndole bolas de algodón en la garganta. A pesar de lo difíciles que pueden haber sido tus circunstancias, matar a tu bebé fue algo verdaderamente terrible”, concluyó.