La semana pasada el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, declaró el bisonte como el “mamífero nacional” para promover su conservación ya que en ese país casi se extingue la especie por la cacería descontrolada.Días después, funcionarios del Parque Nacional de Yellowstone tuvieron que matar a un pequeño bisonte porque un padre con su hijo cargaron al animal y lo llevaron en su auto a las oficinas del parque porque “pensaban que tenía frío”.Una de las visitantes tomó una foto y la publicó en redes sociales: "Lo más destacado del viaje. Estimados turistas: No, el ternero de bisonte no tiene frío ni está perdido. Regresenlo de nuevo. (Sí, los guardaparques se hicieron cargo de la situación)" Karen Olsen Richardson.Esta imprudencia hizo que los funcionarios del parque tuvieran que aplicar eutanasia al ternero. “La interferencia con gente puede causar que las madres rechacen a su prole. En este caso, los trabajadores del parque trataron repetidamente de reunir a la cría con la manada. Estos esfuerzos fracasaron. La cría fue finalmente sacrificada porque fue abandonada y causó una situación peligrosa acercándose continuamente a los visitantes y coches en la carretera”, confirmaron los técnicos del Servicio Nacional de Parques. Apenas se supo que el bisonte fue sacrificado, cientos de personas se quejaron en las redes sociales, pero las autoridades respondieron que para enviar al becerro fuera del parque “éste habría tenido que pasar por meses de cuarentena para ser monitoreado y evitar así el contagio de la enfermedad llamada brucelosis”.Los oficiales también aseguraron que no existen lugares de cuarentena autorizados por el momento y que tengan la capacidad para cuidar de un becerro que es demasiado joven para alimentarse por sí mismo. “Al ser abandonados, esos animales suelen morir de hambre o por la depredación”, aseguraron.El Parque de Yellowstone tiene 5.000 bisontes. Este es uno de los parques nacionales más visitados de EEUU. Es por eso que este hecho ha motivado a recordar a los visitantes que deben evitar interferir en la vida normal de los animales.La agencia federal recuerda que acercarse o alimentar a los animales en el parque no solo es “peligroso”, también es “ilegal”.“El incumplimiento de estas regulaciones puede resultar en multas, lesiones e incluso la muerte. La seguridad de estos animales, así como la seguridad humana, depende de todos los que usan el buen juicio y siguiendo estas sencillas reglas”, concluyeron.