Israel dio este 17 de octubre el golpe más contundente en la guerra contra el grupo terrorista Hamás. Confirmó la muerte de Yahya Sinwar, el máximo líder del grupo terrorista. El operativo había sido anunciado por el FDI, las fuerzas de seguridad de ese país.
“Durante las operaciones de las FDI en Gaza, tres terroristas fueron eliminados. Las FDI y la ISA están comprobando la posibilidad de que uno de los terroristas fuera Yahya Sinwar”, anunció la IDF desde su cuenta de X el jueves.
“El ejército Israelí está realizando pruebas de ADN al cuerpo de un combatiente para confirmar si es Sinwar”, indicó un funcionario que habló bajo condición de anonimato a la AFP.
Posteriormente, el Washington Post confirmó que el líder de Hamás, Yahya Sinwar, arquitecto de los ataques del 7 de octubre contra Israel, fue asesinado por el ejército israelí en Gaza después de eludir a sus fuerzas durante más de un año. Su cuerpo fue identificado tras una prueba de ADN en Israel, citando a un funcionario israelí que habló bajo condición de anonimato. Hamás todavía no confirma el deceso.
Tras casi un año de guerra en la Franja de Gaza, el movimiento islamista Hamás, que gobierna este territorio palestino, se ha visto debilitado con la muerte de varios de sus líderes y de miles de combatientes, sin que ello signifique aún su final.
El 7 de octubre de 2023, comandos de Hamás se infiltraron en Israel, un ataque sin precedentes que desencadenó la actual guerra. Hamás gobierna el enclave desde 2007, cuando expulsó por la fuerza a los hombres de la Autoridad Palestina de Mahmud Abás.
El asalto del 7 de octubre causó la muerte de 1.205 personas en Israel, en su mayoría civiles, según un balance de AFP basado en datos oficiales israelíes. Los comandos islamistas secuestraron además a 251 personas.
Tras este ataque, Israel prometió aniquilar al grupo terrorista de Hamás. En agosto, el ejército israelí indicó que eliminó a más de 17.000 combatientes palestinos en la Franja de Gaza. En total, más de 41.400 palestinos murieron desde el inicio de la contienda, en su mayoría civiles, según datos del Ministerio de Salud del gobierno de Hamás, que la ONU considera fiables.
Dos de sus más altos dirigentes están en la línea de mira de Israel: Yahya Sinwar, considerado como el cerebro de los ataques del 7 de octubre, y Mohamed Deif, jefe de las Brigadas Ezzedin Al Qassam, brazo armado de Hamás, cuya muerte Israel anunció en varias ocasiones, la última en agosto.
Yahya Sinwar, que era el jefe de Hamás en Gaza, fue nombrado jefe político del movimiento tras la muerte de Ismail Haniye en un ataque imputado a Israel el 31 de julio en Teherán.
Desde entonces, “Sinwar es el comandante en jefe: dirige los brazos militar y político” de Hamás, afirma a la AFP un alto cargo del movimiento, organización que surgió coincidiendo con la primera Intifada, el levantamiento palestino de 1987.
Sinwar, al que no se ha visto en público desde hace un año, “interactúa directamente con la oficina política y el mando militar”, añade el alto cargo de Hamás bajo condición de anonimato. “Hay un equipo dedicado a su seguridad, al ser el blanco número uno del enemigo” Israel, añade.
El ataque de Hamás el 7 de octubre fue “un fracaso de seguridad, militar y político”, para Israel. “Cree saberlo todo, pero [...] el enemigo no vio nada”, señala una fuente de las brigadas Al Qassam. Pero desde entonces, reconoce otro alto cargo bajo condición de anonimato, “varios miles de combatientes de Hamás y otros grupos de la resistencia [palestina] murieron en combate”.
Para Bruce Hoffman, investigador en el Council on Foreign Relations (CFR), “las operaciones militares israelíes en Gaza asestaron a Hamás un duro golpe, pero no fatal”.
*Con información de AFP