“¿No te revienta trabajar 12 horas al día para mantener a alguien que no trabaja? A mi sí”, con esas palabras inicia un curioso video publicado el pasado jueves por un empresario e influencer argentino identificado como Mauro Stendel, quien dio a conocer que, en un acto simbólico, envió a la sede del Congreso de su país 256 palas con destino a los parlamentarios como ‘invitación para que trabajen’.
Según Mauro Stendel, el propósito de su gesto es protestar por el bajo desempeño de la rama legislativa de su país, advirtiendo que los funcionarios que devengan mayores sueldos en Argentina, no han dado muestra de productividad, pues en todo el año 2022, apenas adelantaron 15 sesiones, y aprobaron 36 leyes.
Para el empresario, es necesario “incentivar a las personas que más cobran y menos trabajan en nuestro país a que trabajen”, en una fuerte crítica a los políticos, advirtiendo que mientras su país se encuentra sumido en una crisis económica, los diputados devengan sueldos de más de medio millón de pesos argentinos.
Más allá de la retórica, y como lo evidenció él mismo a través de sus redes sociales, en hechos de los que hacen eco los medios locales de Argentina, a la puerta del Congreso, que actualmente no se encuentra en actividades, llegó el referido cargamento de palas, elementos icónicos del trabajo rural, acompañados de una misiva en la que se puede leer “un Congreso lleno de vagos y un país lleno de hambre. Les regalo una pala para que se pongan a laburar”.
Si bien el hecho despertó la curiosidad de quienes se movilizaban el pasado jueves por la zona céntrica de Buenos Aires, próxima a la sede gubernamental, el hecho tomó aún mayor relevancia cuando encontró eco a través de las redes sociales, donde los aplausos para el influencer, con más de 250 mil seguidores en Instagram, comenzaron a hacerse evidentes.
“Agarren la pala y bajen impuestos o vuelvan a sus casas”, sentenció a través de sus redes sociales el joven empresario del sector de la venta de productos pesqueros, que busca facilitar el acceso de los productos sudamericanos en el mercado estadounidense, quien a la vez confesó que, irónicamente, al haber comprado las palas para su acto simbólico, tuvo que pagar impuestos; los mismos que lamentó tuvieran que ser destinados en el sostenimiento de un aparato estatal corrupto.
Dos cosas que llaman la atención en el video
En medio de la llamativa protesta social que el influencer evidenció y lideró, despertaron curiosidad dos particulares hechos que rodean su protesta.
La primera, una advertencia que él mismo hace en su video, al reconocer que pese a que son 257 parlamentarios, solo mandó 256 palas, reconociendo que uno de los congresistas sí adelanta sus funciones.
En ese sentido, el influencer se refirió al líder libertario Javier Milei, una de las caras que suena para las próximas elecciones presidenciales de ese país, a quien le reconoció que “combatir zurdos es un trabajo de tiempo completo”; haciendo mención de la posición política del referido parlamentario.
Un segundo hecho que llama la atención, es la vestimenta empleada por el influencer durante su anuncio, en tanto portó una gorra negra con un mensaje que versa “Make Argentina great again”, una clara alusión al slogan de campaña que empleó el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, durante sus dos campañas electorales.
Precisamente, en su discurso, y más allá de que el Congreso está conformado por funcionarios de las distintas bancada y corrientes políticas, el hombre se fue lanza en ristre contra el sector de la izquierda, afirmando que ”si nos sacamos el ancla del Estado socialista, te aseguro que con esfuerzo y sacrificio hay futuro”.
El influencer sentenció que si bien existen personas que son conscientes de las deficiencias del trabajo de muchos de los legisladores, y que están “cansados de mantener vagos”, no han podido realizar un debido control en tanto se encuentran “ocupadísimos con nuestras empresas y no podemos dejar de trabajar para combatirlos”.
Recientemente las acciones del Congreso de Argentina se han tenido que centrar en el Juicio Político contra los integrantes de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, por lo que la actividad de control político y legislación en sí, ha quedado congelado.