El presidente Nicolás Maduro ha recurrido a la fuerza castrense para evitar el colapso de su gobierno acosado por la grave crisis política y económica que vive el país sudamericano. Las Fuerzas Armadas de Venezuela coordinarán, por decreto presidencial, la distribución de alimentos, medicinas y otros productos básicos para enfrentar la grave escasez que sufre la población y que ha golpeado la popularidad de Maduro, que cuenta con un rechazo de más de un 70%, según una reciente encuesta de Datanalisis.“Es una muestra de la debilidad en la que se encuentra Maduro“, afirma Javier Corrales, catedrático del Amherst College, de Massachusetts. Corrales recuerda que el modelo chavista fue desde sus inicios una alianza cívico-militar. “Desde 2003 hasta que murió Chávez en 2013, el ala civil era fuerte, por lo que no tuvo que respaldarse en los militares. A medida que los civiles le retiran su apoyo, Maduro se ve obligado a recurrir a la fuerza castrense“.Maduro anunció el pasado 11 de julio la creación de la Gran Misión Abastecimiento Soberano, que será dirigida por un Comando para el abastecimiento, conformado por Maduro mismo y el alto mando militar, encabezado por el ministro de Defensa, Vladimir Padrino.¿Gobierno paralelo?Según el politólogo, al ceder al alto mando militar el control sobre la economía, se le da el control del gobierno con lo que se viola una norma democrática fundamental. “El poder militar tiene que estar subordinado siempre al poder civil y con este decreto, esto se acabó en Venezuela. Porque todos los ministros del gabienete tienen que responder a un militar, lo que se asocia con dictaduras militares“. Por decreto, Maduro entrega amplias prerrogativas a los militares sobre la economía venezolana, incluyendo la autoridad para decidir a nivel municipal, regional y empresarial.A tres años de las elecciones presidenciales de 2019, la élite del Partido Socialista Unificado de Venezuela (PSUV) se encuentra ante el dilema de si iniciar la transición lejos de Maduro apoyando el referendo revocatorio, o preservar la unidad del partido de cara a las elecciones. La decisión de colocar al ministro de Defensa en una posición de tal autoridad, podría desalentar a quienes coquetean con un cambio próximo. “Es un hombre que ha sido muy claro al señalizar que está del lado del gobierno y que no permitirá que el país caiga en un caos de inestabilidad“, afirma Corrales.Sin embargo, al otorgar al ministro de Defensa tal poder sobre las tareas del gobierno, Maduro y sus aliados difícilmente podrían resistirse a la realización de un referendo revocatorio si Padrino y otros altos mandos lo respaldan.Padrino, uno de los hijos de ChávezPadrino es uno de los militares premiados por su lealtad tras el intento de golpe de Estado contra Chávez en 2002. Desde entonces fue ascendido sucesivamente hasta ser nombrado ministro de Defensa por Maduro en 2013. Pero analistas recuerdan que tras la derrota electoral del pasado 6 de diciembre, se filtró a la prensa un posible ascenso del general Néstor Reverol al frente del ministerio de Defensa.“No sólo no pudo destituir a Padrino, sino que Maduro tuvo que destituir a Reverol como comandante de la Guardia Nacional. La realidad nos indica que Maduro no ha podido deshacerse de Padrino, el hombre fuerte del gobierno, quien claramente le ha demostrado a Diosdado Cabello y a Nicolás Maduro quien comanda a las Fuerzas Armadas y al gobierno“, sostiene el periodista Vladimir Gessen en el portal Informe21.com.Javier Corrales va aún más lejos con una hipótesis que, asegura, no se puede descartar. “Puede que haya habido un semigolpe de Estado. Que los militares hayan advertido a Maduro que se le acabó la oportunidad. No sabemos si Maduro se ha sometido a Padrino o sI éste sigue obedeciendo a Maduro“.El mercado negro, donde la voracidad continuaráEl periodista Vladimir Gessen critica el Socialismo del Siglo XXI que quería instaurar Chávez y que después de 17 años ha llevado a la ruina a su país. Señala que en su afán por que el Estado controle el mercado, se ha dado impulso a otro: "un mercado de prebendas, de corruptelas, de privilegios, un mercado capitalista salvaje conocido como mercado negro“.Corrales recuerda que en Venezuela el único modo de obtener una ganancia de algún tipo es en los mercados informales. “Consiguiendo acceso a los productos o dólares subsidiados para revenderlos en los mercados informales. Ese es el único modo de obtener una ganancia hoy en día en Venezuela“.El politólogo advierte que mientras siga habiendo controles de precios, escasez de insumos y de divisas, se tienen todas las condiciones para que crezca el mercado negro y la corrupción: “Al entregar el control sobre la administración y distribución de productos básicos a los militares, que son el cuerpo que menos rinde cuentas en el mundo, se tiene una garantía de que la corrupción continuará“.