El hasta ahora vicepresidente paraguayo, Federico Franco, asumió este viernes la Presidencia de Paraguay en una sesión de las dos cámaras del Legislativo, celebrada apenas hora y media después de la destitución de Fernando Lugo. La sesión se abrió con el himno nacional, tras lo cual el presidente del Legislativo, Jorge Oviedo Mato, tomó juramento a Franco. A continuación, Franco pronunció un discurso en el que aseguró que la "transición" que comienza en el país "se realiza dentro del orden constitucional" y "de ninguna manera pone en riesgo la vigencia y principios democráticos universales". Franco repitió dos veces ese mismo mensaje, que dijo haber trasladado textualmente a la misión de cancilleres de la Unasur a la que hoy recibió en Asunción, antes de que un "juicio político" resultara en la destitución de Fernando Lugo como presidente. El liberal puso el acento en su intención de entregar el mando presidencial el 15 de agosto de 2013, cuando concluye el actual mandato, y de ocuparlo hasta entonces buscando la colaboración de todos los partidos y movimientos sociales del país. "La única manera de llevarlo adelante es entendiendo que el país tiene que se construido por todos los sectores, todos los partidos", aseveró el nuevo mandatario paraguayo, cuya asunción ha sido cuestionada por algunos gobiernos sudamericanos. "Vengo a ratificar mi voluntad irrestricta de respetar las instituciones democráticas, el Estado de Derecho, la vigencia de los derechos humanos y los compromisos asumidos" por el Gobierno saliente, aseveró, para negar que acceda al poder con "odio" o "rencores". Su discurso adquirió por momentos un sesgo populista, como cuando pidió honrar a las muerte registradas en Curuguaty (nordeste) por la lucha por la tierra "iniciando el verdadero desarrollo social sostenible con énfasis en la agricultura familiar" o el uso de la energía que le sobra a Paraguay "para industrializar el país", en lugar de cederla a los vecinos, Argentina y Brasil. "Vamos a hacer juntos una política de Estado energética" que permita utilizar los recursos de las presas de Itaipú y Yacyretá "para generar industria y mano de obra" y que nunca más un paraguayo tenga que emigrar en busca de trabajo, propuso. Estos tramos de su discurso fueron muy aplaudidos por los diputados y senadores presentes en la sesión, a los que confió lo departido con la delegación de la Unasur que acudió a Paraguay el jueves por la noche, en plena crisis por el proceso de destitución iniciado contra Lugo. Poco más de 30 horas han transcurrido entre el inicio del proceso este jueves en la Cámara de Diputados y la sentencia de "culpable" de mal desempeño en sus funciones dictada de hoy por el Senado, que supuso la inmediata destitución del exobispo católico. Según Franco, les dijo a los cancilleres de la Unasur que su Gobierno "mantendrá el respeto irrestricto a la Constitución y las leyes y a los tratados y acuerdos internacionales y al cumplimiento de las obligaciones internacionales" que Paraguay tiene como Estado. Tras su juramento y discurso en la sesión conjunta de las dos cámaras del Legislativo, el nuevo líder paraguayo se trasladó caminando al cercano Palacio de Gobierno para ocupar su nuevo despacho, según imágenes retransmitidas por las televisiones del país. Con EFE