Los vientos huracanados y las inmensas olas del ciclón Yaas han dejado al menos tres personas muertas, tras su paso por la costa de la Bahía de Bengala, en la región de Bengala Occidental en India. Es el segundo fenómeno de este tipo en pocos días, en un país que sigue luchando contra la crisis sanitaria derivada de la pandemia de coronavirus.
Las autoridades científicas han manifestado que aunque en el norte del océano Índico son frecuentes este tipo de ciclones, ahora son más recurrentes y devastadores por cuenta del cambio climático.
En el marco de ese contexto, las autoridades gubernamentales de India evacuaron a más de 1,5 millones de personas en los estados orientales de Bengala Occidental y Odisha, con el fin de prevenir al máximo las víctimas mortales.
Justamente, el ciclón Yaas azotó la costa de la Bahía de Bengala luego de que el ciclón Tauktae cobrara al menos 155 vidas en el oeste de India una semana antes. La ministra principal de Bengala Occidental, Mamata Banerjee, alertó que la ciudad costera de Digha resultó “inundada” por olas de hasta cuatro metros de altura.
La funcionaria también reportó dos muertes en esa zona, además de que el ciclón generó lluvias torrenciales y vientos de hasta 155 kilómetros por hora. “Nunca en mi vida había visto una tormenta así”, dijo Purnendu Jana, residente de Digham en declaraciones citadas por AFP.
“El agua podría cruzar la carretera principal por primera vez”, añadió Jana, mientras los reportes oficiales indican que aproximadamente 20.000 casas resultaron afectadas y más de una docena de islas fluviales se inundaron con la ruptura de varios diques.
En el estado de Odisha también se registraron grandes daños, con cientos de árboles arrancados, aunque, por fortuna, los efectos en las infraestructuras eléctricas fueron mínimos, según declaraciones del funcionario de socorro, Pradeep Kumar Jena: “Hemos recibido informes sobre la muerte de dos personas (...) Los funcionarios locales están investigando los dos incidentes”, dijo.
Yaas tocará tierra en los estados de Bengala y Odisha al promediar el miércoles, según indicó el departamento meteorológico indio. El ciclón llegó a ese país asiático mientras lucha contra la pandemia de covid-19, que hace estragos en las comunidades urbanas y rurales.
Una tragedia que se suma a la pandemia
Hasta la fecha, la pandemia del coronavirus ha causado en India la muerte de cerca de 27 millones de personas, y el país ha enfrentado el colapso de la capacidad hospitalaria en varias ciudades. Además, ha tenido que redoblar esfuerzos para mantener el suministro de oxígeno para los pacientes más graves.
“Este ciclón es un golpe terrible para numerosas personas cuyas familias están afectadas por contagios o muertes de covid-19”, declaró recientemente a la AFP el ministro de Desarrollo de la región de Sundarbans, en Bengala Occidental, Bankin Chandra Hazra.
“Cerca de medio millón de personas fueron evacuadas de sus viviendas en la región costera. Es una desafío conseguirles un refugio y mantener la distancia física”, agregó el funcionario sobre el desafío que representará prevenir más contagios en medio de esas circunstancias.
A pesar de la emergencia, India informó el pasado lunes que iniciará la producción masiva de la vacuna rusa Sputnik V, en medio de la crisis sanitaria que atraviesa el país por el aumento de los casos de coronavirus.
El Fondo Ruso de Inversión Directa (RDIF, por sus siglas en inglés) y la empresa farmacéutica Panacea Biotec adelantan el proyecto en una planta de la compañía en la ciudad de Baddi (estado de Himachal Pradesh).
De acuerdo con el gerente de Panacea Biotec, Rajesh Jain, el inicio de la producción es un “gran acontecimiento (...) para volver a la vida normal en la India y ayudar en lo mismo a los habitantes de otros países”.
*Con información de AFP