Al menos dos activistas ecologistas, miembros de la organización de defensa del medio ambiente Just Stop Oil, rociaron con pintura naranja el monumento megalítico de Stonehenge, situado en Reino Unido, para exigir al Gobierno un compromiso para acordar a nivel internacional un “plan equitativo que ponga fin a la extracción y quema de petróleo, gas y carbón para 2030″.
La policía de Wilshire, en el suroeste de Inglaterra, informó en un comunicado que detuvo a dos sospechosos, mientras que Just Stop Oil, que pide el fin de la explotación de combustibles fósiles, se atribuyó la responsabilidad de la acción, asegurando que la pintura en polvo utilizada “pronto desaparecerá con la lluvia”.
Un vídeo que circula en las redes sociales muestra a dos hombres corriendo hacia las enormes piedras que forman un círculo en el yacimiento prehistórico del suroeste de Inglaterra, rociando los monolitos con polvo naranja, mientras algunas personas intentan impedírselo.
“Los agentes acudieron al lugar y arrestaron a dos personas sospechosas de dañar el monumento”, informó la policía, cuando el yacimiento se prepara para recibir a miles de visitantes durante el solsticio de verano.
Estas acciones tienen lugar poco después de que el Partido Laborista haya prometido comprometerse a detener las futuras licencias para el establecimiento de nuevos yacimientos de petróleo y gas como parte de su campaña electoral de cara a las generales previstas para el próximo 4 de julio.
Un portavoz de Just Stop Oil ha manifestado por su parte que el actual Gobierno británico “ya se había comprometido a poner en marcha medidas para cumplir con las anteriores demandas de la organización”.
“Sin embargo, todos sabemos que esto no es suficiente. Seguir quemando carbón, petróleo y gas provocará la muerte de millones de personas. Tenemos que unirnos para defender a la humanidad o lo arriesgaremos todo. Por eso Just Stop Oil exige que nuestro próximo Gobierno firme un tratado jurídicamente vinculante para eliminar progresivamente los combustibles fósiles antes de 2030″, dijo.
La sustancia “pronto desaparecerá con la lluvia, pero no la necesidad urgente de una acción gubernamental eficaz para mitigar las consecuencias catastróficas de la crisis climática y ecológica”, afirmó en X la organización ecologista.
Construido en etapas entre aproximadamente los años 3000 y 2300 antes de Cristo, Stonehenge es uno de los monumentos megalíticos prehistóricos más importantes del mundo debido a su tamaño, planta sofisticada y precisión arquitectónica.
Sus piedras erguidas, que forman un conjunto de círculos misteriosos, atraen a miles de personas cada año para las fiestas paganas del solsticio de verano.
El primer ministro conservador británico, Rishi Sunak, denunció “un vergonzoso acto de vandalismo contra uno de los monumentos más antiguos e importantes del Reino Unido y del mundo”.
El gobierno debe hacer desde hace dos años a las duras acciones de la organización, que ha atacado obras de arte, ha interrumpido competiciones deportivas o interrumpido espectáculos.
Debido a ello, el gobierno conservador ha endurecido la ley sobre el derecho a manifestarse en un intento de impedir las acciones de este grupo, fundado en febrero de 2022, que pide el final de explotación de las energías fósiles antes de 2030.
El líder laborista Keir Starmer, favorito para convertirse en primer ministro tras las elecciones del 4 de julio, que podrían poner a catorce años de gobiernos conservadores, también ha denunciado el modo de actuar de la organización ecologista.
Con información de AFP y Europa Press*