Una cámara de seguridad registró el robo de un hotel cercano al aeropuerto Gatwick en Londres, Inglaterra, y además de la difícil situación, el video reveló un comportamiento poco común sobre el hombre que cometió el delito, lo que causó impacto en medio de los residentes locales.
El hombre fue identificado como Harry Rose, de 25 años, según afirmó el medio local Daily Mail, agregando que este personaje, que también tiene varios antecedentes penales, no actuó solo en el robo al hotel, sino que estuvo acompañado de otro hombre de 21 años identificado como Connor Gooderson.
Al parecer, Rose entró al local forzando la cerradura de la entrada, luego de esto comenzó a llegar su bolso con botellas de licor que buscaba para robar; sin embargo, en medio de su incursión decidió servirse un trago y aprovechar que estaba en medio del bar del hotel.
Según el medio citado, poco después del robo en la tienda, el joven fue arrestado y en medio del Tribunal de Magistrados de Brighton confirmó que había sido él quien robó el bar del hotel. Al parecer, el hecho tomó lugar en febrero de este año y hasta este momento el hombre fue detenido.
Además, se indicó que cuando el hombre estaba en medio del hotel, un empleado del lugar lo confrontó; en ese momento dejó caer las botellas que tenía en su bolso y salió corriendo con Gooderson. El licor se habría quebrado y habrían tenido pérdidas de unos 450 euros, según el medio citado, es decir, 1.969.612 pesos colombianos aproximadamente.
La súplica de un ladrón armado
En la comunidad San Francisco de Campeche, México, el intento de un ladrón de ‘salirse con la suya’ en una pastelería terminó ‘inesperadamente’ al acabar encerrado. Medios locales señalaron que cuando el individuo intentó escapar, la responsable del establecimiento se las arregló para evitarlo.
Las cámaras de seguridad registraron los hechos sobre la 1:06 de la tarde, cuando el sospechoso, vestido con camiseta azul y gorra blanca, ingresó al local y fue directamente al área de la caja. Previamente, se le escuchó a la mujer decir: “hey, hey, salte”, petición que fue ignorada por el delincuente.
Cuando el sujeto empezó a buscar el dinero y exigirle entregar el celular, quien atendía la pastelería se fue alejando poco a poco, hasta llegar a la puerta de vidrio, cerrarla y bajar en cuestión de segundos la reja. En ese instante, el delincuente se apresuró a la entrada y en vano quiso librarse de aquella situación.
Al ver que la reja había quedado asegurada desde afuera, intentó encontrar otra salida y, una vez más, subir el portón. En medio de su desespero, el presunto delincuente empezó a caminar de un lado a otro y hasta le pidió ayuda a la mujer que minutos atrás había escogido como víctima: “Mamita, ayúdame”.
En el video, que no tardó en viralizarse, se le escuchaba eventualmente gritar y poner un estante como barrera en la puerta, seguramente al anticipar que en camino estaban las autoridades. Los destrozos dejados en el lugar donde terminó encerrado no le fueron ‘suficientes’ para escaparse y hacer como si no hubiera pasado nada.
Finalmente, el individuo, de quien no trascendió su identidad, fue capturado y puesto a disposición de la justicia, con material probatorio que es ahora pieza clave en el caso. La aprehensión pudo hacerse gracias al rápido accionar de la empleada, quien no permitió la apertura del establecimiento sino hasta el arribo de la Policía.
Los índices de delincuencia siguen azotando a América Latina. La intranquilidad es una sensación compartida. Los dueños de lo ajeno y otro tipo de hechos continúan buscando víctimas sin hacer distinción de género, edad o estratificación social.