Al menos 15 personas murieron en incidentes violentos registrados durante el pasado fin de semana en la región de Guayas, en Ecuador, según el balance oficial que dieron a conocer las autoridades.
En el cantón Milagro fueron asesinadas cinco personas en un billar, un crimen recogido por las cámaras de vigilancia que muestran a cuatro individuos que llegaron en moto y abrieron fuego con una pistola y un fusil, imágenes que compartió la televisión Ecuavisa.
Por otra parte, cinco personas más fueron asesinadas en una urbanización privada de Daule, incluido un expolicía, Estuardo Granados. En su casa se hallaron posteriormente casi 380 mil dólares y fue detenida su esposa.
En total suman 155 muertes violentas hasta el 29 de enero en la Zona 8, que integran Guayaquil, capital provincial de Guayas; así como los cantones Durán y Samborondón.
Ecuador cerró 2022 con 4.539 muertes violentas, siendo el peor año de la historia, según los registros. El gobierno atribuye la situación al enfrentamiento entre bandas delincuenciales, fundamentalmente las que se disputan territorios para el tráfico de drogas.
Guayaquil bajo fuego
Momentos de pánico se vivieron el pasado 11 de enero, en las instalaciones de un hospital de la ciudad de Guayaquil, Ecuador, cuando, hombres armados llegaron al establecimiento en horas de la madrugada con el objetivo de atacar a uno de los pacientes allí recluidos, quien en días pasados había sido objeto de un atentado sicarial que no terminó con desenlace mortal.
Según recogen medios locales de esa ciudad, ubicada en la provincia de Guayas, el grupo de hombres armados que llegaron hasta el hospital estaba conformado por al menos cuatro personas, quienes entraron al establecimiento intimidando al personal de seguridad, enfermeras, pacientes y médicos, y buscando la ubicación de un hombre que se encontraba recluido en el lugar desde el pasado 6 de enero.
La persona que estaba siendo buscada por los hombres armados es un hombre que ya había sido atacado el pasado viernes, 6 de enero, en una de las calles de la ciudad, cuando se movilizaba en una camioneta blindada, en hechos que afortunadamente no lograron segar su vida cuando se desplazaba por un sector de la ciudad conocido como ciudadela Kennedy.
De acuerdo con el reporte de medios locales, una vez dentro de las instalaciones de la clínica en Guayaquil, los hombres armados fueron abordados por miembros de la guardia de seguridad particular del hombre que permanece recluido, desatando una balacera al interior de la unidad médica.
Si bien los delincuentes no lograron segar la vida del paciente que se recupera del atentado, en medio de la balacera lograron asesinar a uno de los hombres de su guardia privada, quien pereció en uno de los pasillos de la clínica ante los ojos impotentes de varios de los presentes, pues los médicos, pese a encontrarse en un hospital, no pudieron actuar oportunamente debido a la gravedad de las heridas, y al contexto mismo en que se desarrolló el tiroteo.
En medio del intento de huida de los delincuentes, ante la imposibilidad de lograr ‘rematar’ a la víctima del atentado del 6 de enero, también se desató otra balacera a las afueras del centro médico, lugar hasta donde alcanzaron a llegar miembros de la Policía Nacional de Ecuador, quienes retomaron el control de la zona, y además desplegaron el operativo de las autoridades forenses quienes se encargaron del levantamiento del guardia abatido.