México es uno de los países más apetecidos para visitar por los turistas, tanto por su comida, como por su gente, por ser colorido y alegre, así como por los paisajes que ofrece, desde pirámides milenarias hasta playas paradisiacas. Sin embargo, recientemente, un ciudadano polaco fue blanco de ataques por parte de las personas que se encontraban presente, luego de que este hombre se atreviera a subir por la pirámide Kulukkán, que es conocida como El Castillo, ubicada en la zona de Chichén Itzá, Yucatán.
Pues bien, ya es la segunda vez en tres meses que sucede una situación similar, pues subir por las escaleras de este tipo de estructuras arqueológicas está prohibido y es castigado por las autoridades locales, además del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH). Sin embargo, lo singular de esta situación fue la reacción violenta que tuvo una persona que estaba presente en el momento en el que el extranjero se atrevió a violar las reglas.
El hecho quedó grabado en un video, difundido en redes sociales y comentado por cientos de personas. En él se logra ver al hombre llegado a la base de la pirámide escoltado por dos personas; sin embargo, abajo lo estaba esperando un grupo de turistas, entre los cuales estaba un hombre sin camiseta que tenía un palo de escoba en sus manos, y fue en un momento de descuido que este último comenzó a pegarle al turista.
A través de las redes sociales se indicó que el hombre tuvo que pagar una multa cercana a 1.226.000 pesos colombianos. “¡Lo vuelven a hacer! Turista polaco sube a la pirámide de Kukulkán, en Chichén Itzá. Autoridades señalan que tuvo que pagar una multa de 5.000 pesos”, indicó un usuario.
“Como siempre gente que cree que el remedio es la agresión, si la acción del turista tuvo una consecuencia de acuerdo a la ley, para qué demostrar la falta de educación, y de valores, agrediéndolo. Siempre se tiene que recurrir al lado SALVAJE de la situación”; “Hace 35 años sí dejaban subir a la pirámide”; “Quizá no fue lo correcto, quizá fue exagerado, pero no es la primera vez que pasa, si ven que solo le dan una palmada van a continuar, además, todas las constituciones del mundo tienen una ley que dice: el desconocimiento de la ley no nos exime de ella”, son algunos de los comentarios de los usuarios ofendidos por el turista.
Adulto mayor se hizo viral en TikTok por hacer ‘saltos mortales’
Un adulto mayor se convirtió en la sensación, no solo en su lugar de vacaciones, sino también en las redes sociales. Luego de que un usuario de internet tomara los videos en los que se muestra al señor de 79 años haciendo acrobacias en el aire antes de caer en el agua, poniendo a prueba a los jóvenes presentes.
Pues bien, el hecho tuvo lugar en Córdoba, Argentina, y el protagonista del video fue identificado como Alberto Frascasoli, un abuelo que desde el año anterior ha venido siendo el centro de atención por los clavados que realiza y en entrevistas a medios locales ha revelado que este tipo de actividad es la que mantiene frecuentando, muy a pesar de lo riesgoso que pueda ser para su edad.
El video que se viralizó tiene lugar en una zona conocida como playa Miami, a la orilla del río Santa Rosa, que queda ubicada en la ciudad de Santa Rosa de Calamuchita, según recalcaron medios locales. Se recalcó, además, que este abuelo comenzó hacer clavados desde que cumplió sus 60 años, y sería arquitecto de profesión, según recoge El Litoral.
Así entonces, en el video se puede apreciar al abuelo subiendo una cuesta para quedar a unos 7 metros del agua, y con el apoyo de sus espectadores, al llegar a la cima, toma el impulso necesario, calibra su salto, se prepara, respira profundo y luego se tira haciendo un “salto mortal” hacia atrás para caer en el río.
“Toda mi vida he hecho deporte y comer liviano: frutas y verduras. No comer mucho y hacer gimnasia, bicicleta, natación. Bailar tango que son 5 kilómetros cada vez que vamos a una milonga. Esto que voy a hacer ahora... subí por primera vez a los 60 años. Pero ya tenía habilidad para hacer cosas así”, afirmó el abuelo en entrevista con medios locales, según recoge La Nación.