Las masivas protestas contra el régimen de Nicolás Maduro habrían sido infiltradas por mercenarios internacionales, según denuncias hechas a través de redes sociales. En ellas se asegura que algunos de esos mercenarios serían del temido Grupo Wagner de Rusia, una organización paramilitar privada que ha estado activa en varios conflictos alrededor del mundo, incluyendo Ucrania, Siria, Libia, la República Centroafricana, Mali y otros países africanos.
Se asegura que en una reunión de militares venezolanos en donde hablaban sobre las estatuas de Hugo Chávez que habían sido derribadas se ve la imagen de un soldado con la insignia del Grupo Wagner.
Ante esas denuncias, una de las primeras personalidades en reaccionar fue el presidente ucraniano Volodímir Zelenski, quien expresó su preocupación por la posible presencia del Grupo Wagner en suelo venezolano.
“Hay informes preocupantes sobre la presencia de mercenarios rusos de Wagner en Venezuela junto a las fuerzas gubernamentales. Dondequiera que van estos matones, llevan muerte y desestabilización. Este es un claro ejemplo de la descarada intromisión de Rusia en los asuntos de otros países, así como de su estrategia habitual de sembrar el caos en todo el mundo”, sostuvo el dirigente europeo en su cuenta de X.
Agregó que el pueblo de Venezuela está pasando por un momento muy difícil y que la única salida es a través de procedimientos pacíficos y democráticos, no enviando asesinos para agravar aún más la situación. “Condenamos el uso de la fuerza contra los manifestantes pacíficos e instamos a todos a respetar la elección del pueblo. Los verdaderos líderes no se esconden de su propio pueblo detrás de mercenarios”, enfatizó Zelenski, quien también ha tenido que lidiar con mercenarios del Grupo Wagner en su territorio.
Implicaciones geopolíticas
Aunque oficialmente se presenta como una entidad privada, el Grupo Wagner ha sido acusado de actuar como un brazo no oficial de las fuerzas militares rusas, permitiendo al país europeo involucrarse tácitamente en conflictos de otros países.
Al no tener un carácter oficial como representante de una nación, se asegura que el Grupo Wagner ha cometido excesos como violaciones a los derechos humanos y crímenes de guerra en las áreas donde opera. Su presencia suele estar vinculada a situaciones de inestabilidad y violencia.
Se dice que en medio de la represión que vive Venezuela no solo están apareciendo mercenarios del Grupo Wagner, sino también grupos de operaciones cubanos e iraníes.
Justamente, algunos de esos países son de los pocos en el mundo que felicitaron a Nicolás Maduro por su victoria en las elecciones del pasado 28 de julio, mientras que crece el número de naciones occidentales que han expresado su preocupación por la transparencia del proceso y piden un recuento detallado de los votos.
Ese es el caso de Alemania, España, Francia, Italia, Países Bajos, Polonia y Portugal, países que este 3 de agosto urgieron a las autoridades venezolanas a “publicar rápidamente todos los registros” de la elección presidencial de Venezuela.
Esta solicitud la hacen con el fin de “garantizar la total transparencia” del proceso, según manifestaron en una declaración publicada por el Gobierno italiano, donde expresaron su “fuerte preocupación” por la situación que se vive actualmente en Venezuela, donde la oposición denuncia fraude en los comicios.
“Los derechos de todos los venezolanos, en particular de los líderes políticos, deben respetarse durante este proceso. Condenamos enérgicamente cualquier arresto o amenaza contra ellos”, reza el comunicado.