El día ha llegado, tras 18 años ausente de las pantallas, volvió a la televisión española el popular programa concurso Gran Prix, un divertido espacio en el que representantes de los distintos municipios o localidades de ese país, se ponían a prueba en juegos de habilidad física y cognitiva.
El programa, que se hizo célebre durante la década de los años noventas, logró reconocimiento mundial, gracias a que varias de sus temporadas lograron ser emitidas en canales fuera de España, en una etapa de la televisión española que era reconocida también por la emisión de producciones como El juego de la Oca.
En el caso de Gran Prix, que volvió a las pantallas ibéricas este lunes, 23 de julio, el formato cuenta con el mismo presentador que se hizo célebre en los 90, Ramón García, quien ahora estará acompañado de un par de presentadoras que le pondrán el toque contemporáneo al programa, con la adición de comentarios del público vía redes sociales y la adaptación de las plataformas online al espacio.
Si bien, el paso de los años se nota en el presentador, que ahora luce canas, este se ha mostrado con la misma alegría y lozanía de los años en los que se hizo mundialmente conocido por conducir el programa. En la presentación, según ha precisado RTVE, también se encontrarán la presentadoras conocidas como Cristinini y la actriz Michelle Calvó, quienes en compañía de una figura llamada ‘Wilbu’, retornarán la alegría característica que este concurso le imprimía a las noches españolas.
Las presentadoras que se integraron al programa, han revelado, en declaraciones entregadas a la Cadena SER, con ocasión del relanzamiento del formato, que se sienten honradas de compartir con Ramón, advirtiendo que el Gran Prix marcó parte importante de su infancia y que es un placer hacer parte de su nueva versión, augurando éxito al proyecto.
Si bien, el programa ha conservado algunos de los juegos que le hicieron célebre como “la batata caliente”, uno de los principales cambios que se han introducido, es la salida de la popular vaquilla; un animal vivo que hacía parte de algunas de las pruebas, imprimiéndole adrenalina tipo ‘San Fermín’, a los juegos.
Sin embargo, la figura de la vaquilla, como símbolo del programa se ha negado a desaparecer, y si bien no hará parte de los juegos, ahora lo hará a través de una mascota tipo NBA.
Además de la ‘batata caliente’, se mantendrán formatos recordados como ‘Troncos locos’, los bolos; e incluso ‘baloncesto en pañales’, que se refería a una prueba en la que los participantes portaban trajes inflables de bebés sumo.
Como factor adicional, se agregó al formato un dinosaurio, que molestará a los concursantes durante las pruebas, mientras que el juego del ‘manotazo’, será reemplazado por unos ‘pingüinos’.
El regreso del Gran Prix se dio con expectativa este lunes, en medio del cierre de una jornada en España que estuvo marcada por la incertidumbre propia de la falta de claridad sobre el futuro político de ese país, tras las elecciones parlamentarias del pasado domingo, donde si bien el PP alcanzó a aumentar el número de curules y desbancó al Psoe como principal fuerza política del país, no ha alcanzado las mayorías absolutas que le permitan, de momento, formar gobierno, incluso con la alianza con el partido VOX, la tercera fuerza política de España.