El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, dijo que estaba “molesto” por no haberse reunido con su homólogo ucraniano Volodimir Zelenski, a quien además percibió desinteresado en negociar la paz con Rusia.
Molesto
Zelenski, quien salió de la cumbre del G-7 en Hiroshima con un renovado apoyo diplomático y promesas de más ayuda militar, había buscado una reunión a solas con Lula, quien ha sido acusado de ser suave con Rusia respecto a su invasión.
Ambos líderes dijeron que problemas de agenda los privaron de reunirse. Zelenski dijo sarcásticamente que eso pudo haber “decepcionado” a Lula.
“No estaba decepcionado”, respondió Lula en una conferencia de prensa. “Estaba molesto porque me gustaría encontrarme con él y discutir el tema... Por eso marqué la reunión”, añadió. “Zelenski es mayor de edad, sabe lo hace”, dijo.
Lula dijo que su equipo había agendado una reunión con Zelenski para la tarde del domingo, sin embargo, el líder ucraniano llegó tarde y dijo que su agenda se llenó después.
El apoyo a Zelenski
Zelenski obtuvo un considerable apoyo por parte de los líderes del G7 en la cumbre, incluido un añorado respaldo por parte de Estados Unidos para acceder a aviones de combate F-16.
Además, atrajo a los países invitados que no pertenecen al G7, como el caso del primer ministro de la India, Narendra Modi, quien prometió hacer “todo lo que podamos” para resolver el conflicto. “Entiendo tu dolor”, le dijo Modi a Zelenski.
Desde Brasil, en cambio, no hubo muestras de apoyo semejantes. Lula dijo que no entendía el punto de reunirse con Zelenski en este momento porque ni el mandatario ucraniano ni el presidente ruso Vladimir Putin dan muestras de querer la paz: “Por ahora, ambos están convencidos de que van a ganar la guerra”, dijo.
Lula está impulsando la vía de los diálogos de paz, y propuso a Brasil como mediador entre otros países “neutrales”, incluidos China e Indonesia.
Sin embargo, el líder brasileño recibió críticas el mes pasado cuando acusó a Estados Unidos de “alentar” la guerra. Luego de que la Casa Blanca lo acusó de “repetir como un loro la propaganda china y rusa”, Lula rebajó el tono y dijo que Brasil condenaba la invasión rusa de Ucrania.
En todo caso, el lunes se volvió a mostrar crítico al decir que el presidente estadounidense, Joe Biden, está enviando el mensaje de que “Putin debe rendirse y pagar por todo lo que destruyó”, “Ese mensaje no está ayudando”, dijo.
Con información de AFP.