El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, ha pedido este miércoles 24 de enero una investigación internacional sobre el siniestro de un avión militar en Bélgorod, cerca de la frontera rusa, del que Moscú responsabiliza a las Fuerzas Armadas ucranianas.
Las autoridades de la región rusa de Bélgorod han confirmado la muerte de los 74 ocupantes del avión, en el que supuestamente viajaban 65 prisioneros ucranianos a bordo que, según el Ministerio de Defensa ruso, iban a ser intercambiados por militares rusos.
“Es evidente que los rusos juegan con las vidas de los prisioneros ucranianos, con los sentimientos de sus familiares y con las emociones de nuestra sociedad. Es necesario aclarar todos los hechos”, ha subrayado el mandatario ucraniano.
Zelenski ha convocado al ministro de Defensa, Rustem Umerov, así como al comandante en jefe de las Fuerzas Armadas ucranianas, Valeri Zaluzhni, para discutir el accidente, ha informado en un discurso vespertino recogido por la agencia de noticias Ukrinform.
Según ha detallado, el Servicio de Seguridad de Ucrania “está investigando todas las circunstancias” alrededor del accidente. Zelenski ha ordenado, además, al ministro de Exteriores, Dimitro Kuleba, que informe a los socios de Ucrania “sobre los datos disponibles” al respecto.
Rodion Miroshnik, alto cargo del Ministerio de Exteriores y encargado de supervisar posibles crímenes de guerra cometidos por Ucrania, ha responsabilizado a Kiev de lo que considera un “derribo” y ha señalado que se trata de un “acto de barbarie que muestra un total desprecio por la vida humana”.
Por su parte, la Dirección Principal de Inteligencia del Ministerio de Defensa de Ucrania ha asegurado que no cuenta con “información fiable y completa” sobre los pasajeros a bordo del avión, pero sí ha reconocido que para este miércoles estaba previsto un intercambio de prisioneros que finalmente no se ha producido.
Ucrania y Rusia han pactado varios canjes de prisioneros desde el inicio de la agresión rusa en febrero de 2023, el más multitudinario de ellos este mismo mes. Gracias a la mediación emiratí, cerca de medio centenar de personas de ambos bandos pudieron regresar de vuelta a sus hogares.
Más de 8.000 ucranianos, incluidos 1.600 civiles, están en manos de los rusos, según el gobierno de Kiev.
En julio de 2022, Rusia y Ucrania ya se habían acusado mutuamente del bombardeo contra una prisión que albergaba a presos ucranianos en Olenivka, un pueblo en el este, ocupado por Rusia.
Combates en Donetsk
Desde el comienzo de su ofensiva, Rusia ha vivido varios desastres aéreos relacionados con aviones del ejército y Ucrania reivindicó la semana pasada haber derribado dos aviones rusos.
Los principales combates se concentran en el frente este de Ucrania, sobre todo en las inmediaciones de Avdiivka, una ciudad industrial del Donbás que ha sido objeto de reiterados asaltos de las fuerzas rusas, que intentan rodearla.
Las autoridades regionales de Donetsk anunciaron que dos personas murieron y ocho resultaron heridas en un ataque ruso con cohetes en la localidad de Girnyk.
Ante los bombardeos rusos, el gobierno de esa región indicó que este miércoles se empezó a evacuar a 72 niños de dos municipios.
Con información de AFP y Europa Press