Miembros de los partidos demócratas y republicanos libran una silenciosa batalla por el control de la radio en español en Miami y otras ciudades donde hay una importante participación latina, según revela un informe del portal The Week.
De acuerdo con el estudio, el 95 % de hispanos residentes en Miami sintoniza la radio al menos una vez por semana, ya sea para escuchar noticias o para entretenimiento.
Además, de acuerdo con la consultora Nielsen, el consumo de radio entre la población latina de Estados Unidos llega al 97 % y al 99 % en latinos mayores de 50 años.
Así las cosas, el 78 % de las estaciones de radio en Estados Unidos hablan en español y solo un 15 % son bilingües, lo que da una luz sobre la importancia de la radio para llegar a esos públicos.
Con esto en mente, republicanos y demócratas son conscientes de la relevancia que tiene el llegar a los oídos de ciudadanos latinos a través de la radio y ya mueven sus fichas económicas para adquirir frecuencias que permitan llevar sus mensajes, apunta el portal de noticias The Week.
En este sentido, aseguraron que en marzo de este año un grupo de inversionistas, muy afín a las ideas de Donald Trump y el exgobernador Jeb Busj, anunció el lanzamiento de Americano Media, la primera cadena radial nacional de corte conservador, con sede en Miami.
A la par, las activistas políticas y empresarias Jess Morales y Stephanie Valencia, afines a las ideas de Hillary Clinton y Barack Obama, compraron la emisora Radio Mambí y otras 17 estaciones en español en Estados Unidos, a través de su conglomerado Latino Media Network.
Con sus cartas jugadas, los miembros de los dos partidos se tiran el agua sucia entre sí, alegando que sus opositores utilizarán las ondas radiales para enviar mensajes con sus propias ideas.
Los demócratas, por ejemplo, advirtieron que con el lanzamiento de Americano Media se podía contaminar las ondas radiales latinas con mensajes a favor de Trump y los gritos de “socialismo” que afectaron a sus partidos en 2020.
Por su parte, los republicanos aseguraron que con la compra de Radio Mambí y las demás estaciones se buscaba favorecer a la empresa del demócrata George Soros, con el objetivo de manipular a los medios locales para “impulsar la agenda marxista entre los votantes”.
Sobre esta batalla, el portal cita a la vicegobernadora de Florida, Jeanette Núñez, quien afirmó que no tolerará los intentos de controlar la narrativa libre de las emisoras, donde se pongan en la mesa los puntos de vista conservadores y demócratas, y perjudicar a la comunidad no solo latina sino estadounidense en general.
Entre los latinos residentes en Miami también hay molestias sobre el tema y algunos, citados por The Week, aseguran que se puede estar incurriendo incluso en censura porque se está silenciando una voz diferente cuando se debe abrir el debate con los diferentes puntos de pensamiento para que sean los latinos quienes tomen sus propias decisiones.
Sin embargo, más allá de las quejas, un grupo de senadores republicanos aseguraron en una carta que se hará un análisis minucioso de la compra de Latino Media Network de 18 estaciones de radio para estar seguros de que no se está ejerciendo una influencia sobre al menos un tercio de los hispanos de este país.
Mientras tanto, según The Week, los demócratas también hicieron lo propio cuando se realizó la compra de Radio Caracol al Grupo Prisa, asegurando que “las ondas de radio son las ondas de la gente”, y la FCC necesita examinar cada venta para asegurarse de que sea de interés público.
Por su parte, los grupos empresariales compradores de las estaciones se mantienen firmes en que no hay influencias políticas de ningún tipo y se trata solo de negocios importantes para cada uno, con el objetivo de ampliar su cobertura en la industria de la radio latina local.
Por lo pronto, la radio resulta ser una carta muy importante para los dos partidos de cara a las contiendas electorales, así como los diferentes debates políticos que se fraguan en el Congreso.