El rey emérito Juan Carlos I de España ahora vive en una isla lujosa de Nurai, luego de que tres años atrás tuviera que abandonar su país, en el verano de 2020, debido a los escándalos que afectaron a la monarquía española. Luego de una corta estancia en Galicia, disfrutando de su gran pasión que comparte con su hijo, el rey Felipe VI, navegar en vela regresa a Abu Dabi, bajo la protección de una de las familias más poderosas, ricas e influyentes de Oriente Medio, el clan al-Nahyan.
En la isla de Nurai cuenta con un terreno de 43 hectáreas, construido en medio del mar en el año 2014, y esta recibió el premio al proyecto más lujoso del mundo por la revista Newsweek, pues las agencias de viajes lo venden como las ‘Maldivas del Medio Oriente’.
En este lugar, Juan Carlos I dispone de once mansiones con una superficie media de 1.700 metros cuadrados, más otros 4.000 de jardín. El alquiler de esta propiedad ronda sobre los 30.000 euros por noche, pero solo algunas están disponibles, mientras que la mayoría tiene duelo o están en venta en un precio que oscila los 13 millones de euros.
La villa del rey está distribuida con plantas, además de contar con una protección al exterior de grandes marquesinas. Según lo registrado por Infobae, “dispone de seis habitaciones y siete baños, un amplio patio, una playa privada, sauna, jacuzzi, sala de juegos, billar, futbolín, sala de cine, despacho, una sala médica y una piscina con temperatura regulable”.
Y es que en medio del confort en el que vive Juan Carlos I se sabe que el tema de su seguridad y protección lo costea el Gobierno español y cuenta con un jefe de seguridad, el guardia civil Vicente García-Mochales, que le acompaña desde el primer día, además del círculo próximo al monarca que consta de agentes, escoltas seleccionas y pagados por el Ministerio del Interior, un dispositivo que está compuesto también por los servicios de inteligencia del país árabe, la policía nacional y la seguridad privada de la isla de Nurai.
El rey, según la biografía autorizada sobre don Juan Carlos, Mi rey caído, escrita por la periodista francesa Laurence Debray y publicada en marzo de 2022, señala que vive aislado físicamente, pero en constante conexión con España gracias a la tecnología.
Infobae señala también que “la autora del libro escribió que se acostaba pronto y se levantaba temprano, leía la prensa española, mantenía conversaciones con sus abogados y con los pocos amigos que le quedan”.
El emérito, que gobernó reinó durante casi 40 años, estuvo implicado en investigaciones fiscales de Suiza y España sobre sus cuentas en el extranjero en un caso de supuesto fraude fiscal y blanqueo de capitales, por lo que decidió hacerse a un lado y dejar a su hijo Felipe como rey.
Tan pronto Juan Carlos I se marchó del país optó por alojarse en el lujoso Hotel Emirates Palace, propiedad de la familia real del emirato, un resort de 395 habitaciones con 1,3 kilómetros de playa privada, que usó hasta noviembre de 2020, para posteriormente vivir en la lujosa isla.
En medio del estado de salud del rey emérito, algunos medios indicaron que está pensando en la isla para irse a otro complejo más protegido, discreto, y todo parece indicar que es una residencia del Gobierno de los Emiratos, que no tiene escaleras para mejorar su movilidad.