La pandemia de coronavirus ha matado a mucha gente en el mundo, pero en Noruega las medidas de confinamiento dejaron a muchas empresas fúnebres sin trabajo, obligándoles a recurrir al Estado para seguir a flote. El confinamiento provocó en Noruega un retroceso de la mortalidad y la anulación de las ceremonias fúnebres. Lea la historia completa aquí