Israel y los grupos armados palestinos cometieron posibles "crímenes de guerra" durante el conflicto de Gaza en 2014, estimó un informe de la ONU publicado este lunes y que rebatió el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu, según el cual "Israel no comete crímenes guerra". La Comisión independiente de investigación de Naciones Unidas sobre el conflicto de Gaza en 2014 reunió "informaciones sustanciales que ponen en evidencia posibles crímenes de guerra cometidos por Israel y por los grupos armados palestinos", señala el informe encargado por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU y publicado este lunes en Ginebra. La jueza estadounidense Mary McGowan, que preside la comisión encargada de realizar el informe, destacó que "la amplitud de la destrucción y del sufrimiento humano en Gaza no tuvo precedentes" y que el conflicto, que duró 51 días entre julio y agosto de 2014, "tendrá un impacto en las futuras generaciones". "Israel no comete crímenes de guerra. Israel se defiende contra una organización terrorista que pide su destrucción y que comete numerosos crímenes de guerra", reaccionó en la Kneset, el Parlamento israelí, el primer ministro Benjamin Netanyahu, refiriéndose a Hamas, el grupo islamista que controla Gaza. Israel denunció igualmente la "parcialidad" del Consejo de los Derechos Humanos de la ONU. El ministerio de Relaciones Exteriores israelí afirmó que se está estudiando el informe pero consideró que el documento "estuvo dirigido por una institución notoriamente parcial (y) recibió un mandato abiertamente parcial". Hamas acoge positivamente el informe En cambio, Hamas "celebró" el lunes el documento de la ONU, aunque no hizo ninguna mención a las sospechas de crímenes de guerra formuladas por Naciones Unidas contra el conjunto de grupos armados palestinos. "Hamas celebra la condena, a través de este informe, del ocupante sionista por sus crímenes de guerra durante su última agresión contra Gaza", declaró a la AFP Fawzy Barhoum, portavoz del movimiento islamista en el poder en la franja de Gaza. El informe denuncia "la impunidad que prevalece a todos los niveles" en lo que concierne a la acción de las fuerzas israelíes e insta a Israel a "darle la vuelta a su lamentable balance" para perseguir a los responsables. Además, el documento lamenta que las autoridades palestinas hayan "fracasado siempre" en su cometido de llevar ante la justicia a aquellos que violan las leyes internacionales. Durante el conflicto, 2.140 palestinos perdieron la vida, 1.462 de ellos, civiles; mientras que Israel registró 73 muertos, 6 de los cuales eran civiles, y 1.600 heridos. Israel se opuso fuertemente a la decisión de pedir este informe y no permitió que la comisión de investigación de Naciones Unidas acudiera sobre el terreno, por lo que ésta recabó 280 testimonios de ambos lados por teleconferencia o por teléfono, así como 500 testimonios por escrito. El presidente inicial de la comisión, el profesor de derecho canadiense William Schabas, tuvo que dimitir en febrero por las presiones de israel, lo que retrasó la publicación del informe de marzo a junio. La comisión se declaró "preocupada por el uso extensivo de Israel de armas letales en un importante radio" de impacto, y también denunció el tiro "indiscriminado" de miles de cohetes por parte de los palestinos con el fin de "sembrar el terror" entre los civiles israelíes. La comisión presentará su informe al Consejo de Derechos Humanos el próximo lunes. El organismo pidió al gobierno de Israel que las investigaciones de eventuales crímenes "no se limiten a simples soldados aislados sino que incluyan a miembros de la jerarquía política y militar" cuando sea necesario. Por otro lado, instó "a las autoridades de Gaza y a los grupos palestinos que cesen todo ataque con cohetes y otras acciones que puedan sembrar el terror entre la población civil de Israel" y a tomar medidas contra "las ejecuciones extrajudiciales, la tortura y los tratos inhumanos degradantes".