Bardem, un reconocido defensor del medio ambiente, es parte de la campaña del grupo ecologista Greenpeace para impulsar un Tratado Global de los Océanos en la ONU, que permitiría crear una red mundial de santuarios marinos. "Nuestros océanos están al borde del colapso y todos somos en parte culpables de ello. Ahora también todos debemos hacer algo para detenerlo", dijo el actor, urgiendo a los delegados del organismo multilateral a actuar "AQUÍ Y AHORA". Los estados miembros de las Naciones Unidas se reúnen desde este lunes y hasta el 30 de agosto en la tercera sesión de una conferencia intergubernamental lanzada en septiembre de 2018 con miras a alcanzar para 2020 un tratado sobre las aguas internacionales, o alta mar, que cubren cerca del 46% de la superficie del planeta pero según los científicos carecen de protección ambiental adecuada. Le puede interesar: Con candados harán una escultura en homenaje al Río Bogotá "El mundo les está observando mientras negocian este Tratado Global de los Océanos. No podemos permitirnos el lujo de equivocarnos", señaló Bardem, instando a los delegados a atender las señales de alarma de los ecosistemas marinos, considerados vitales para la supervivencia del planeta. Bardem, quien no ocultó su preocupación ante una sala "con muchas sillas vacías", enumeró los problemas que enfrentan los océanos: contaminación por plásticos, sobrepesca, minería de fondos marinos, prospecciones para buscar petróleo y recursos genéticos, y acidificación de las aguas, además del calentamiento global que altera el ecosistema. "Los océanos nos pertenecen a todas las personas, pero su destino está ahora en sus manos", dijo el actor, dirigiéndose a los delegados. "Por favor, protejan nuestros océanos". La Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar fue adoptada en 1982, pero la llamada "Constitución de los océanos" no regula las actividades en alta mar. Hasta ahora, 168 de los 193 Estados miembros de la ONU se adhirieron a ella, pero algunos no la ratificaron. Estados Unidos ni siquiera la firmó. "El tratado debe tener reglas efectivas para áreas totalmente protegidas en alta mar", dijo Sandra Schoettner, la bióloga marina de Greenpeace, al detallar el periplo que barcos de la organización llevan adelante, desde el Ártico a la Antártida, para exponer la "amenaza" de polo a polo. "No tenemos tiempo que perder", subrayó. - "Sin océano para los débiles" - El evento en la ONU incluyó un avance del film "Santuario", sobre la expedición de Bardem a la Antártida junto con Greenpeace el año pasado. La cinta dirigida por el cineasta español Álvaro Longoria se estrenará en septiembre en el Festival Internacional de Cine de San Sebastián. Bardem, que ganó el Óscar a mejor actor en 2008 por la película de los hermanos Ethan y Joel Cohen "Sin lugar para los débiles", también titulada en España "No es país para viejos", se rió cuando presentaron el documental como una suerte de "Sin océano para los débiles". "Todos somos villanos", dijo, en alusión a su personaje, tras señalar que el mayor error ahora sería que este tema "no nos importara". "Esto es real y todos somos protagonistas y me temo que no hay Dwayne Johnson que nos salve", agregó refiriéndose al héroe de películas de acción de Hollywood. Consultado sobre la retirada del presidente estadounidense Donald Trump del Acuerdo Climático de París de 2015, que busca limitar el calentamiento global, Bardem dijo que "no se puede vivir en la negación". Lea también: Donald Trump quiere que Estados Unidos compre Groenlandia "Me gustaría decirle: ‘Por favor, preste atención a lo que nos dice la Naturaleza constantemente‘", dijo Bardem. Durante una sesión de fotos más temprano en Times Square, Bardem dijo que garantizar la salud de los océanos es una "causa mayor" que debe convocar a todos. "Soy una de las millones de personas que están reclamando (...) que ese tratado sea serio, detallado y fuerte, para que por lo menos en 2030, acorde a lo que dicen los científicos, tengamos protegidos al menos el 30% de los océanos", dijo, mientras a su alrededor tableros electrónicos gigantes exhibían azules imágenes de vida marina.