El presidente Joe Biden aseguró este lunes 13 de marzo a los estadounidenses que su sistema bancario “es seguro” y sus depósitos estarán disponibles “cuando los necesiten”, tras la quiebra del Silicon Valley Bank (SVB)
En declaraciones desde la Casa Blanca, Biden añadió que los contribuyentes de Estados Unidos no se harán cargo de las pérdidas del banco y que pedirá al Congreso que “refuerce” la regulación del sector bancario.
“Voy a pedir al Congreso y a los reguladores bancarios que refuercen las reglas para los bancos, de modo que sea más improbable que se repita este tipo de quiebra bancaria”, dijo en declaraciones televisadas desde la Casa Blanca. Biden agregó que “los directivos de estos bancos será despedida”.
El presidente de Estados Unidos intenta reforzar la confianza, el único baluarte contra un contagio a gran escala tras la quiebra del SVB.
Las autoridades han tomado medidas en Estados Unidos y en Europa para proteger los depósitos de este banco californiano en quiebra y que se encuentra bajo tutela pública.
Horas antes la secretaria del Tesoro estadounidense, Janet Yellen, afirmó que el Gobierno busca evitar el “contagio” financiero tras la quiebra de SVB, pero fue clara y descartó un rescate de la entidad bancaria.
“Queremos asegurarnos de que los problemas que existen en un banco no creen un contagio a otros que son sólidos”, dijo Yellen durante una entrevista con la cadena CBS.
Desde la misma entidad se le envió un mensaje a la Corporación Federal de Garantía de Depósitos (FDIC, por sus siglas en inglés) para que garantice los fondos de los clientes del banco y que pueda tener acceso a los mismos a partir este lunes 13 de marzo.
“Los depositantes tendrán acceso a todo su dinero a partir del lunes. Ninguna pérdida asociada a la resolución de Silicon Valley Bank correrá a cargo del contribuyente”, según se lee un comunicado conjunto del Tesoro estadounidense, la FDIC y la Reserva Federal, que señalan que los accionistas y algunos deudores no garantizados no estarán protegidos.
La entidad financiera, con una importante cartera de clientes entre las start-ups tecnológicas, fue finalmente intervenido por la FDIC el pasado viernes por las dudas en torno a su liquidez y solvencia.
Las autoridades federales han estado trabajando durante el fin de semana en posibles fórmulas para garantizar los fondos de los clientes, principalmente presionando para que otra entidad adquirieran el banco. El pasado domingo 12 de marzo se abrió la subasta para pujar por la entidad, según informa la CNN, pero finalmente la solución no ha venido desde el sector privado.
El SVB tenía el 31 de diciembre de 2022 “aproximadamente” en activos 209 mil millones de dólares y “alrededor” de 175.400 millones de dólares en depósitos, según la FDIC.
Las autoridades estadounidenses cerraron el banco el pasado viernes 10 de marzo para proteger los depósitos de sus clientes.
El sector bancario en su conjunto se hundió el pasado jueves 9 de marzo en Wall Street, pero el viernes, las acciones de algunos bancos más grandes lograron volver a subir.
*Con información de AFP.