En un claro apoyo de Estados Unidos a Ucrania, asolada por el conflicto, el secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, dijo el martes (19 de septiembre) que Washington proporcionará tanques M1 Abrams a Kiev.
Austin insinuó que los tanques de batalla “pronto” entrarán en Ucrania, una medida que reforzará el posicionamiento de Ucrania contra Rusia en una guerra que ya lleva su segundo año.
“Me complace anunciar que los tanques M1 Abrams con los que Estados Unidos se había comprometido previamente entrarán pronto en Ucrania”, dijo Austin según los informes de los medios.
Austin ha expuesto durante una reunión del Grupo de Contacto para Ucrania parte de la ayuda anunciada por la Administración de Joe Biden, en un momento en que “las tropas ucranianas libran una dura lucha para recuperar su territorio soberano”, con un “firme progreso”, fruto de la contraofensiva.
“Juntos vamos a conseguir para Ucrania lo que necesite, cuando lo necesite”, ha señalado el jefe del Pentágono, con la vista puesta “a largo plazo”. Así, ha destacado la importancia de los sistemas de defensa antiaérea que ayudan a las autoridades ucranianas a protegerse de los bombardeos.
En el caso concreto de la ayuda norteamericana, Austin se ha mostrado “encantado” de poder anunciar que los tanques Abrams M1 llegarán “pronto” a Ucrania, pese a que el compromiso inicial ―de una treintena de carros― se remonta ya a enero. También ha reiterado la oferta para participar en la formación de pilotos ucranianos en el manejo de cazas F-16.
“Nuestro compromiso común será vital durante las actuales batallas y también en el largo camino que hay por delante”, ha dicho el secretario norteamericano, que confía en que Ucrania no solo pueda frenar la actual ofensiva, sino también disuadir a Rusia de futuras invasiones. La causa ucraniana ―ha señalado― es “la justa”.
“En esta guerra, el tiempo no corre a favor de (el presidente ruso, Vladimir) Putin. El tiempo nunca va a favor del dictador que lanza una guerra imperial por capricho y nunca va a favor de la agresión”, ha añadido desde la base militar de Ramstein, en Alemania.
Noruega anunció que donará unos 50 vehículos de carga a Ucrania que, de acuerdo con su ministro de Defensa, Bjorn Arild Gram, ayudarán a llevar suministros a zonas sin carreteras.
Avance firme de la contraofensiva
Las fuerzas ucranianas, pertrechadas con la ayuda militar de las potencias occidentales, emprendieron en junio una ardua y ruda contraofensiva contra las líneas fortificadas rusas y en las últimas dos semanas han intensificado la presión.
Pero, este progreso ha sido limitado, lo que activó un debate sobre la estrategia militar en curso y tanto Estados Unidos, como la OTAN advirtieron que esperan un conflicto largo.
El jefe del Pentágono dijo este lunes que la contraofensiva “continúa progresando” con paso firme.
Desde el inicio de la contraofensiva hace unos tres meses, las tropas ucranianas “han penetrado varias capas” de la defensa rusa, destacó en Ramstein el jefe del Estado Mayor estadounidense, el general Mark Milley.
Los ucranianos “avanzan muy lentamente” a través de estas capas “preservando su potencia de combate”, añadió Milley.
Alemania bajo presión
Las autoridades ucranianas insisten que es urgente que reciban más ayuda y tras un intenso debate varios países aceptaron entrega a Kiev cazas F-16 estadounidenses, pese a que el manejo de estas naves requiere entrenamiento y las primeras unidades tardaran varios meses en estar operativas.
Ucrania también presiona para que Alemania le suministre misiles de crucero de largo alcance Taurus. Esta cuestión no está zanjada, dijo el lunes 18 de septiembre el ministro de Defensa de Alemania, Boris Pistorius, que especificó que primero hay que resolver temas “políticos, jurídicos, militares y técnicos”.
Entre las cuestiones por resolver está la interrogante de si este armamento puede usarse sin el apoyo de soldados del ejército alemán y los temores del gobierno de Berlín de que estos misiles puedan alcanzar territorio ruso y haya una escalada del conflicto.
“Lo que más necesita Ucrania” son municiones, afirmó el ministro de Alemania, que antes de la reunión anunció un nuevo paquete de ayuda de 400 millones de euros.
“Estamos concentrados en las necesidades más urgentes de Ucrania, como la defensa aérea”, recordó Austin, al ser preguntado sobre los misiles de crucero de largo alcance.
Casi todos los días se producen en Ucrania bombardeos rusos con drones. Estos causaron el martes la muerte de seis civiles en Kupiansk (este), otros dos en Jersón (sur) y uno en Leópolis (oeste), anunciaron las autoridades ucranianas.