24 horas después de que el Organismo Internacional para la Energía Atómica (OIEA) confirmara que Irán enriqueció uranio al 83,7 % en la planta de combustible de Fordow en enero, Estados Unidos hizo una dura advertencia al respecto.

Se trata de la alerta de una posible producción de material capaz de experimentar una fisión con neutrones libres por parte de Irán, lo que se necesitaría para construir una bomba nuclear “en unos doce días”, como asegura el Pentágono. Esto en medio de las crecientes preocupaciones internacionales en torno al programa nuclear iraní.

Por su parte, el vicesecretario de Defensa para Políticas de Estados Unidos, Colin Kahl, ha indicado que las autoridades iraníes han logrado unos progresos “destacables” en su programa nuclear desde 2018, cuando la Administración del entonces presidente, Donald Trump, se salió del acuerdo de forma unilateral.

“En 2018, cuando la Administración previa decidió abandonar el acuerdo nuclear, Irán habría necesitado doce meses para producir material fisible para una bomba”, dijo Kahl antes de incidir en que “ahora necesitaría unos doce días”, según CNN.

La OIEA ha alertado que el enriquecimiento de uranio por parte de Irán corresponde al estancamiento de las conversaciones para reactivar el acuerdo de 2015, “Irán informó a la agencia de la ONU que pueden haber ocurrido fluctuaciones no deseadas en los niveles de enriquecimiento”, dice el informe del organismo.

El uranio enriquecido, que se encuentra apenas por debajo del porcentaje necesario para producir una bomba atómica, fue detectado durante una inspección en la planta.

La citada agencia de noticias ya había informado a principios de esta semana de que inspectores internacionales habían detectado estas cantidades de uranio.

La agencia nuclear de la ONU confirmó la detección en Irán de partículas de uranio enriquecido a 83,7 %, apenas por debajo del 90 % requeridos para fabricar una bomba atómica. | Foto: davidhills

Sin embargo, el jefe del Organismo para la Energía Atómica de Irán (OEAI), Mohamad Eslami, ha resaltado que las diferencias han sido resueltas y ha recalcado que la investigación llevada a cabo por un equipo del organismo internacional revela que no hubo “desviaciones específicas”.

“Estas acusaciones se han planteado desde hace 20 años y las negociaciones derivaron en el acuerdo nuclear”, ha manifestado, antes de incidir que las afirmaciones en torno a un enriquecimiento superior al 84 % atañen “a una partícula que no puede ser vista ni con microscopio”.

El portavoz del OEAI, Behruz Kamalvandi, afirmó la semana pasada que la existencia de estas partículas es habitual durante el proceso de enriquecimiento de uranio y ha incidido en que “lo que importa es el producto final e Irán nunca se ha embarcado en un enriquecimiento a un nivel superior al 60 %”.

El uranio enriquecido, que se encuentra apenas por debajo del porcentaje necesario para producir una bomba atómica, fue detectado durante una inspección en la planta. | Foto: Copyright 2022 The Associated Press. All rights reserved

“El OIEA es muy consciente de que esas situaciones pasan durante el trabajo. En varios casos en el pasado se observaron diversos niveles de enriquecimiento y se rindieron cuentas por ello. Este último asunto será igualmente aclarado”, manifestó entonces Kamalvandi.

Irán negó la semana pasada que esté enriqueciendo uranio por encima del 60 % y subrayó que estas informaciones buscan “distorsionar la realidad”, después de que la agencia Bloomberg publicara que inspectores internacionales habrían detectado cantidades de uranio enriquecido a niveles justo por debajo de los necesarios para fabricar un arma nuclear operativa.

Por su parte, el ministro de Exteriores de Irán, Hosein Amirabdolahian, ha asegurado que su país siempre ha estado a favor de la vía diplomática y que nunca se ha retirado de la mesa de negociaciones en materia del acuerdo nuclear, mientras que ha afirmado que Washington “se ha desviado” y ha realizado “declaraciones engañosas”.

“Es la parte estadounidense la que se ha desviado de sus obligaciones, por lo tanto, poner condiciones y hacer declaraciones engañosas y contradictorias no ayudará a resolver el problema y no ayudará a resolver el hecho de que las consecuencias de la no implementación del (Plan de Acción Integral Conjunto) JCPOA están completamente dirigidos a Estados Unidos”, ha dicho, según ha recogido la agencia de noticias IRNA.

Por ello, ha recomendado a la Administración Biden que “acepten su error y avancen hacia la corrección”, agregando que los países europeos “deberían seguir su propio papel constructivo y no cometer errores de cálculo”.

*Con información de Europa Press.