En medio de las preparaciones que adelanta el Gobierno de Estados Unidos para su participación en la próxima conferencia de revisión del Tratado de no proliferación de armas nucleares, las autoridades de ese país dieron a conocer su firme interés en abogar por la continuidad de este importante acuerdo internacional, crucial para la seguridad del mundo.
Así, según revelaron voceros del Gobierno Biden, el interés de Estados Unidos irá enfocando en abogar no solo porque el tratado pueda continuar, sino también para que los países signatarios de este se comprometan a fortalecer el acuerdo en virtud de armonía mundial, en momentos en que la tensión por la disputa en Ucrania y las distintas acciones en Asia - Pacífico, encienden las alarmas internacionales ante eventuales escaladas bélicas.
En declaraciones recogidas por medio internacionales, trascendieron algunas palabras entregadas por voceros de la administración nacional de Estados Unidos en las que se advierte que durante los comités preparatorios de la versión 11 de la revisión del tratado, la meta trazada por Estados Unidos es “fortalecer este tratado decisivo, no a pesar de los desafíos que enfrentamos, sino debido a ellos”.
Según medios internacionales, el pronunciamiento por parte de la administración de Estados Unidos estuvo en cabeza del portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, y fue dada a conocer en el marco del inicio del comité preparatorio; una etapa que se extiende desde el 31 de julio hasta el 11 de agosto, y que tiene lugar en la ciudad de Viena, Suiza.
En su pronunciamiento, Miller advirtió que el foco de la administración Biden frente a este acuerdo multilateral se ha centrado bajo principios de ‘buena fe’, y de momento el objetivo es hacer vinculante el artículo 6 de referido tratado, referente al llamado desarme nuclear, lo que representa a entrega y destrucción de este arsenal por parte de los diferentes países, advirtiendo que además del desarrollo de nuevas armas de este alcance, el mundo debe abogar por eliminar la amenaza referida a las armas de ese tipo ya existentes.
En sus declaraciones, el portavoz dijo que se debe abogar por el cumplimiento y defensa del acuerdo de no proliferación de armas nucleares, señalando que también es necesario un mecanismo que no solo garantice el cumplimiento, sino también que sirva para condenar el no cumplimiento.
Dentro de las principales preocupaciones que se han referido frente a la coyuntura mundial, se encuentra el tema de las acciones rusas y su apoderamiento de la planta nuclear en Ucrania, advirtiendo que con ello se ha ido en contra del derecho de este país a emplear, para usos pacíficos, la energía nuclear, señalando que nada garantiza que el apoderarse de planta garantice que Rusia no la usará con fines peligrosos para el mundo.
En ese sentido, otro de los focos de preocupación para Estados Unidos se ha centrado en la incertidumbre frente al desarrollo de armas nucleares por parte de China, y la falta de claridad sobre la coyuntura de Irán.
Finalmente, el punto que mayor riesgo representa frente a la actualidad del tratado de no proliferación, se remite a la actuación de Corea del Norte que además de retirarse del acuerdo, ha acelerado su producción armamentística, de la cual hace gala con amplia frecuencia.