El presidente de Israel, Benjamín Netanyahu, tiene un proyecto de reforma judicial el cual no ha caído bien entre la ciudadanía y en gran parte de los inversionistas de Estados Unidos.
Un grupo de 255 inversores estadounidenses enviaron una carta al mandatario israelí advirtiéndole que su país dejaría de recibir una gran suma de dinero proveniente de ese país, debido a esa reforma que planea aprobar.
“Líderes en la comunidad empresarial estamos obligados a revaluar la confianza en Israel como destino estratégico para la inversión, la obtención de talento, la construcción de centros de ingeniería y el mantenimiento de la propiedad intelectual”, se lee en la misiva que dieron a conocer varios medios de comunicación en Israel.
En el documento revelado se pueden ver las firmas de importantes figuras del mundo económico de Estados Unidos, como las del exsubsecretario del Tesoro estadounidense, Jeffrey Goldstein, o la del exdirector ejecutivo de Thomson Reuters, Ton Glocer. “También será cada vez más difícil abogar y defender a Israel a nivel internacional”, agregaron en la carta.
Pero no solo estos inversionistas están en desacuerdo con la reforma judicial que propone Netanyahu. Los ciudadanos de Israel siguen protestando ante lo que parece inevitable.
Decenas de miles de personas se han venido manifestando y ya completan diez semanas consecutivas contra el proyecto.
La coalición de partidos de derecha y ultraderecha formada en diciembre por el primer ministro Benjamin Netanyahu se prepara para pisar el acelerador del proceso legislativo.
Según sus detractores, el texto, que busca reducir la influencia del poder judicial en beneficio del poder político, amenaza la separación de poderes y el carácter democrático de Israel.
Netanyahu y su ministro de Justicia, Yariv Levin, consideran en cambio que esa reforma restablecerá un equilibrio de fuerzas entre los legisladores y la Corte Suprema, a la que ven como una institución politizada.
Como en las últimas semanas, la manifestación principal tuvo lugar este sábado en el centro de Tel Aviv adonde, según los medios, más de 100 mil personas acudieron con banderas blancas y azules.
En las ciudades de Haifa (norte) y de Beerseba (sur) se batieron récords de participación, con 50 mil y 10 mil personas respectivamente, según los medios. La Policía no comunica sobre el número de manifestantes en este país de nueve millones de habitantes.
“Es una de las semanas más importantes en la lucha para preservar la democracia israelí frente a quienes intentan destruirla. Todos los israelíes que tengan la Declaración de Independencia en el corazón deben salir este con fuerza y valor para defender al Estado de Israel”, dijo uno de los líderes en las protestas, según declaraciones recogidas el diario The Times of Israel.
El presidente de la comisión de leyes del Parlamento, Simcha Rothman, tiene previsto realizar audiencias sobre el proyecto desde el domingo 12 de marzo hasta el miércoles 15 de marzo con vistas a respetar el calendario establecido con el ministro de Justicia.
El Ejecutivo, el más derechista de la historia del país, desea aprobar los principales puntos de la reforma antes del 2 de abril.
Con información de AFP