La familia de Jordan DeMay no quiere que otras familias pasen por la tragedia que les atormenta la vida desde el pasado mes de marzo, cuando él acabó con su vida de un disparo.
Solo después de la tragedia, sus padres se vinieron a enterar que desde hacía tiempo venía siendo extorsionado por un hombre nigeriano, Samuel Ogoshi, de 22 años.
Ogoshi había comprado una cuenta de Instagram hackeada, dani.roberts, a través de la cual se comunicó con Jordan y otros víctimas.
El joven, quien estudiaba bachillerato en Marquette Senior High School, cayó ante los pedidos de Ogoshi de que le enviara fotos en las que aparecía desnudo.
Cuando lo logró, empezó a extorsionarlo, según se lo contaron los DeMays a Foz News Digital.
“Puedo enviar estos desnudos a todo el mundo y publicarlos hasta hacerlos virales. Págame ahora mismo”, dijo el nigeriano.
“¿Cuánto?”, le preguntó Jordan y Ogoshi le pidió 1.000 dólares.
Pero el joven solo pudo mandarle 300 dólares, ante lo cual arreciaron las demandas de Ogoshi.
En vista de ello, horas después, el adolescente le manifestó que no tenía los 700 dólares restantes y que se iba a suicidar.
La fría respuesta de Ogoshi fue: “Bueno, hazlo rápido. O haré que lo hagas. Lo juro por Dios”.
Al día siguiente, sus padres lo encontraron muerto, con una herida de bala que se había propiciado él mismo.
La Policía fue puesta en alerta y Ogoshi fue detenido junto con otros dos jóvenes, Samson Ogoshi, de 20 años, y Ezekiel Ejehem Robert, de 19, acusado de extorsionar sexualmente a más de 100 jóvenes y adolescentes en Estados Unidos, todo por internet.
Actualmente, ellos enfrentan cargos como conspiración para explotar sexualmente a menores, conspiración para distribuir pornografía infantil y conspiración para cometer acoso en internet, aseguró Fox.
Los sospechosos pronto serán extraditados a Estados Unidos, donde Ogoshi podría pagar cadena perpetua o 30 años en prisión como mínimo, dado que se le imputa explotación sexual de un menor resultante en suicidio.
Por supuesto, nada de eso es suficiente consuelo para los padres.
En diálogo con Fox, John DeMay dijo: “Alguien vino a sus habitación a las 3 de la mañana y lo asesinó a través de Instagram, cuando todos estábamos dormidos en la noche y no tuvimos ninguna oportunidad de detenerlo”.
Recordó además que su hijo era inteligente, buen estudiante y gran atleta.
Por su parte, el FBI respaldó la alerta que los DeMay quisieron dar a las demás familias contando su historia en un cadena nacional.
De acuerdo con el ente de investigación, se presenta actualmente un incremento en los casos de extorsión sexual por Internet contra menores de edad, que caen en la trampa de enviar imágenes íntimas a personas que se hacen pasar por quienes no son.
En 2022, informó también el New York Post, el National Center for Missing and Exploited Children’s Cyber Tipline recibió alrededor de 32 millones de reportes de sospecha de explotación sexual de menores.
Esa misma entidad informó que la inducción en línea para intercambiar materiales comprometedores subió de 82 por ciento de 2021 a 2022.